Desalojos masivos, carreteras cortadas y miles de hectáreas arrasadas por el fuego

El fuego ya calcina en Málaga 1.800 hectáreas de monte, la mayoría un bosque de pinos entre los términos municipales de Alhaurín de la Torre, Mijas y Alhaurín el Grande. «No sabemos las calvas de vegetación sin arder que habrá, que esperemos que sean muchas, pero hasta el momento ese es el perímetro del incendio», ha señalado la Consejera de Medio Ambiente, Carmen Crespo, quien anunció que se van a producir los primeros realojos de vecinos en la zona de Lauro Golf.

En total van a regresar 300 personas a sus casas, quedan 2.700 personas fuera de sus hogares, que han sido asistidas en pabellones. La mayoría se ha marchado a casa de familiares hasta que puedan regresar a sus hogares. En los pabellones deportivos de Alhaurín el Grande y Alhaurín de la Torre han pasado la noche unas 60 personas, sobre todo por el desalojo de la urbanización Pinos de Alhaurín en mitad de la madrugada.

Las autoridades recomiendan en los municipios afectados cerrar puertas y ventanas, sobre todo para evitar intoxicaciones por humo. En la zona de Mijas se va a dar acceso a los repetidores de comunicaciones a los técnicos para que puedan ponerlos en marcha, ya que se vieron afectados por el incendio en las primeras horas.

La extinción sigue avanzando en condiciones adversas. Pese a que sopla el viento de Levante, que suele llevar humedad a la zona, en esta ocasión el viento es seco y eso no facilita las tareas contras las llamas. Del mismo modo se esperan temperaturas por encima de los 30 grados, lo que favorece la propagación pese a que no hayan fuertes rachas viento.

En estos momentos se está combatiendo el fuego con siete medios aéreos -que pasarán a ser 18 a lo largo del día-, 250 efectivos terrestres, 200 bomberos forestales y 50 urbanos del Consorcio Provincial de Bomberos.

El subdirector del Centro de Operaciones del Infoca, Alejandro Molina, ha explicado este sábado que el incendio está divido en cuatro sectores. En ellos se trabaja con diferentes objetivos y estrategias. El lugar más 'frío' es la zona de Mijas y el más ' caliente' es entre Alhaurín el Grande y Alhaurín de la Torre. Se está usando maquinaria pesada para cortar el avance, así como fuego técnico para eliminar el combustible (vegetación seca), que haga propagarse el incendio.

La investigación sobre las causas del fuego está abierta. Hasta el momento, la Brigada de Investigación de Incendios Forestales del Infoca ha accedido al punto de origen del fuego para buscar las posibles. El Seprona de la Guardia Civil es el que se ha hecho cargo de las diligencias de investigación.

Durante la noche, el Infoca informa que los trabajos contra las llamas han tenido éxito. Parte de los trabajos de madrugada se han centrado en el uso del fuego técnico para eliminar combustible, que es masa forestal seca que puede alimentar el fuego y acelerar su avance. «El fuego se combate con fuego», decía un responsable de la extinción este viernes en el puesto avanzado de mando de Alhaurín el Grande.

Cuatro incendios forestales están activos en el norte de Cáceres. El fuego no da tregua a Extremadura en plena ola de calor y más de 250 profesionales luchan contra las llamas.

El foco que más preocupa actualmente es el que está en las inmediaciones del Parque Nacional de Monfragüe. Existen tres zonas críticas, según la Consejería de Agricultura extremeña, que son el salto del Corzo, el pico de Miravete y la carretera Nacional-V. En estos puntos están trabajando en torno 120 efectivos de tierra y ocho medios aéreos, tal y como ha repasado la directora general de Emergencias, Nieves Villar.

Aunque también ha manifestado que la evolución a lo largo de la mañana ha sido positiva. «Humea y no vemos fuego», ha declarado. Las condiciones meteorológicas extremas hace que la precaución deba ser máxima.

En las últimas horas el frente avanza hacia los términos municipales de Deleitosa y Campillo de Deleitosa, en dirección opuesta al Parque Nacional de Monfragüe.

Este incendio, que se declaró en la tarde del jueves, ya ha obligado a la evacuación de tres municipios: Casas de Miravete, Romangordo e Higuera de Albalat. Estas dos últimas localidades, en la madrugada de hoy. En total unas 500 personas han tenido que ser desalojadas. «La noche fue muy dura con una exacerbación muy brusca de este incendio», ha señalado Villar, que también ha explicado que la evacuación de Romangordo fue muy difícil puesto que había una residencia de ancianos. «Los residentes se han derivado a Don Benito y Villanueva de la Serena y a la residencia Asistida de Cáceres», ha detallado la director general de emergencias.

De las cerca de 400 vecinos que se desalojaron en la última madrugada, la mayoría se han desplazado a Navalmoral de la Mata. «Tenemos a 102 personas filiadas en el albergue que se ha habilitado», ha añadido Villar.

Poco después del mediodía se ha abierto al tráfico un carril de la autovía A-5. «Para facilitar el trasvase de las personas que llevan bastante tiempo retenidas», según Villar. Esta vía, al igual que la carretera Nacional-V, se cortó de madrugada y ha vuelto a interrumpirse el tráfico esta mañana.

Otro centenar de efectivos están trabajando en el incendio forestal de Las Hurdes, aunque con menos medios aéreos.

Este fuego, que lleva activo desde el lunes, también mantiene el nivel 2 de peligrosidad. «Confiamos en que en las próximas horas tengamos mejor pronóstico», ha indicado la directora general de Emergencias en la mañana de hoy.

El fuego de Sierra de Gata ha quedado extinguido y ha quemado cuatro hectáreas. De hecho la evolución ha sido positiva en las últimas horas. Pese a ello, todavía no se ha planteado la vuelta a sus casas de las personas desalojadas en los últimos días. «Hay que estabilizar bien los municipios», ha comentado Villar sobre Ladrillar, Cabezo, Riomalo de Arriba, Las Mestas, Batuequilla, la Horcajada y Aceitunilla, que son las poblaciones evacuadas.

En cuanto al incendio forestal declarado en la mañana de hoy en Sierra de Gata, en el término municipal de Torre de Don Miguel, ya ha quedado extinguido. Pese al susto inicial, ya que se declaró el nivel 1 de peligrosidad por la cercanía de las llamas a infraestructuras aisladas, la evolución fue favorable desde un primer momento.

Se derivaron medios de extinción a la zona con mucha velocidad y se ha podido controlar con rapidez. Ha quemado cuatro hectáreas.

La alcaldesa de Torre de Don Miguel, Valentina Jiménez, afirmaba en un primer momento que el fuego estaba a menos de dos kilómetros del pueblo. «Hay un helicóptero y esperamos que se controle pronto el fuego, que está en la carretera de Torre de Don Miguel a Gata. Hay bomberos que han venido, que estaban fuera de servicio y esperamos que venga más gente. Hay vecinos que están ayudando a apagar las llamas. Si viene más gente y hay suerte, se puede apagar pronto, pero está todo muy seco».

Por último, sí continúa activo el incendio que se reactivó el miércoles en Santa Cruz de Paniagua.

Castilla y León sufre este sábado una nueva jornada de ola de calor en sus terrenos forestales, que bajo situación de «alarma» por fuegos presentan una dispar evolución de los incendios ya activos. Mientras Monsagro (Salamanca) y Navafría (Segovia) mantienen el nivel 2 de gravedad, en Zamora el panorama mejora y tanto el de Roelos de Sayago como el de Figueruela de Arriba, que de nuevo amenazaba la Sierra de la Culebra, han bajado a nivel 1.

El de Monsagro ha concentrado esta noche a un importante número de medios, buena parte de los cuales se han afanado en frenar el frente que iba directo contra la base de Maíllo, de la que ayer tuvieron que ser trasladarse los medios aéreos. Los contrafuegos «han funcionado» sin afección para las pistas.

Continúan, además, en nivel 1 los incendios forestales originados en Navalonguilla, en la provincia de Ávila, el de Villafranca del Bierzo y el de Candelario, en la Sierra de Béjar, donde ha arrasado cerca de 800 hectáreas desde el lunes.

De momento, cinco localidades siguen desalojadas en Castilla y León a causa de las llamas activas. Se trata de los municipios salmantinos de Monsagro, Morasverdes y Guadapero, el segoviano de Torre de Val de San Pedro y el zamorano de Villarino de Manzanas.

Las hectáreas afectadas por los incendios que asuelan el monte gallego desde la descarga eléctrica del pasado jueves se cuentan ya por miles. A media tarde de este sábado el recuento era de más de 4.000 hectáreas de monte arrasado, la mitad de ellas en el incendio de Folgoso do Caurel, el que más preocupa. Las temperaturas extremas que la Comunidad lleva una semana soportando y que mantienen los valores máximos por encima de los 30 grados no ayudan en el control de la decena de fuegos de importancia registrados en los montes, donde el despliegue de medios y efectivos es máximo.

La situación más apremiante sigue dándose en Folgoso do Courel y A Pobra do Brollón, en la provincia de Lugo, en alerta por la proximidad del fuego a núcleos habitados. Según el consejero de Medio Rural, José González, «el mayor foco de preocupación» está en la montaña de Lugo, si bien los medios están actuando y no se han producido desalojos, a excepción de la evacuación preventiva de 40 jóvenes de un campamento en A Pobra do Brollón. En este municipio sigue decretada como medida preventiva la 'situación 2' en el incendio registrado en la parroquia de Saa con una superficie provisional de 550 hectáreas afectadas y 22 brigadas, 11 motobombas, 1 pala, 2 helicópteros y 4 aviones trabajando en su control.

Activo sigue también otro foco localizado en la misma parroquia, en este caso con 50 hectáreas quemadas. En Folgoso do Courel seguía decretada la alerta por proximidad a núcleo habitado en el incendio registrado en la parroquia de Seceda, que se inició a las 1,40 horas del viernes, y que, según las últimas estimaciones provisionales, afecta a una superficie de 950 hectáreas. Las llamas en este caso avanzan a gran velocidad y el operativo desplegado, con cinco aeronaves, cuenta también con efectivos de la UME desplegados. La alerta seguía también en vigor en un incendio de la parroquia de Vilamor, también en Folgoso, donde las llamas amenazan el núcleo de Carballal. La estimación inicial habla de 300 hectáreas quemadas. Y otro fuego, el tercero de Folgoso, permanece activo en Vilamor con 500 hectáreas, lo que eleva la cifra global en este municipio a 1.790 hectáreas.

También en la provincia de Lugo, en Quiroga, permanece activo un incendio en la parroquia de Outeiro, que según las últimas estimaciones afecta a una superficie de 250 hectáreas. Activo desde las 11,42 horas de este viernes, también en Quiroga, hay otro fuego, en la parroquia de Nocedo, que ronda las 180 hectáreas. Y desde las 12,42 horas de este viernes sigue activo el tercer fuego de Quiroga, que afecta a 90 hectáreas. Para su control se movilizaron hasta ahora 4 agentes, 15 brigadas, 7 motobombas, 2 aviones y 1 helicóptero.

En la provincia de Orense, que acapara las temperaturas máximas de toda Galicia, seguía activo un fuego en Vilariño de Conso, en la parroquia de Pradoalbar. Afecta a unas 160 hectáreas en el Parque Natural do Invernadeiro y en su control se afanan hasta ocho medios aéreos y decenas de efectivos. En el caso de Carballeda de Valdeorras permanece activo el incendio registrado en la parroquia de Riodolas, que afecta ya a 950 hectáreas, pero pese a que la superficie quemada es extensa, arde monte raso y no afecta a viviendas.

La cara más amable del parte de incidencias en el monte gallego la protagonizan todos los fuegos que en las últimas horas han sido sofocados o controlados en Rodeiro, Melón, Cualedro, Ribadavia o Baiona, y que dan cuenta de la afectación de esta ola de incendios en la Comunidad. Los partes metereológiocos no avisan de una tregua inminente, aunque sí recogen una bajada de las temperaturas de cara al lunes que favorecerá los trabajos de control y apagado de las llamas, y que podrían poner el fin a esta semana negra en el monte.