Celso Arango: «La 'ley trans' perpetúa el machismo hasta su extremo más absoluto»

-¿Cómo se siente tras la aprobación de la ley tras tantos meses advirtiendo sobre sus efectos?

-Muchas veces la ideología, la ambición y la búsqueda de votos de la política pueden más que la ciencia, que lo racional, lo mesurado... Y hay gente que es incapaz de aprender de sus errores y sobre todo de los errores de quienes haciendo exactamente lo mismo se han dado cuenta. Me da mucha pena porque es tan evidente que esto va a derivar en denuncias... Pero lo que me preocupa sobre todo es que se van a producir daños irreversibles en el menor.

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Elena Calvo

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-Hay quienes responden a las críticas a esta ley diciendo que hay una psiquiatría de derechas y otra de izquierdas.

-No hay ciencia de derechas ni de izquierdas, ni especialidades médicas de izquierdas y de derechas. Hay una especialidad médica basada en hechos, en experiencia, en lo que se ha visto que ha sucedido en otros países y una ciencia mala, una especialidad médica mala, una psiquiatría mala y errorres y aciertos. Esto no es derechas ni izquierdas y creo que ha quedado constatado porque las personas que creo que han sufrido mayor golpe son las de segmentos feministas, independientemente de su ideología política.

-¿Y mediante esa experiencia qué están viendo?

-Lo que estamos viendo nosotros y los suecos, ingleses y noruegos es que cuando se hacen las cosas mal se toman decisiones que son irreversibles y que afectan gravemente a la calidad de vida de las personas. Lo que estamos viendo es que el fenómeno emergente de adolescentes niñas que dicen que quieren ser niños de forma rápida y sin haberlo pensado previamente ni siquiera en su infancia se ha multiplicado en estos últimos 10 años de forma exponencial.

-¿Hay más niñas que niños?

-Entre los adolescentes que vemos, un 80 por ciento son niñas que se quieren convertir en niños. Eso es el mayor golpe bajo que se le puede dar al feminismo porque esas niñas están diciendo que no quieren ser niñas porque es una cosa mala porque te meten mano, porque se ríen de ti... y lo guay es ser tío. ¿Y eso es feminismo? Eso es perpetuar el machismo hasta sus extremos más absolutos.

-¿Ven que muchos acaben arrepintiéndose?

-Vemos adolescentes que tienen alguna patología psiquiátrica que en un momento determinado influye en su decisión. Incluso algunos ni siquiera viven un género distinto. Cuando les preguntan en las evaluaciones tienen un género que coincide con su sexo, pero piensan que haciéndose trans van a tener acceso a otro círculo de relaciones sociales, etc. Lo ven como solución milagrosa a algo que no es así y luego se dan cuenta. En países donde esto se hace desde hace tiempo como Holanda, Suecia o Reino Unido los estudios muestran que el 60-70 por ciento de los menores dicen que ya no son trans. Si ya les has cambiado el sexo en el registro y les hormonas y los operas, sin una buena evaluación y diagnóstico lo que haces es desproteger a los menores.

-¿Hay algún plazo por el que se considera que su decisión es firme?

-No hay un tiempo objetivo. Pero los que nos llevamos dedicando toda la vida a la psiquiatría infantil hemos visto siempre a niños y niñas trans de verdad, y los hay. Lo que no habíamos visto nunca es esta avalancha de adolescentes, la inmensa mayoría con trastornos mentales, que recurren a ser trans como recurrieron en su día a la bulimia, o a cortarse. Es la eclosión de malestares internos que dependiendo del momento se manifiestan de una forma o de otra.

-¿Cómo se puede valorar la madurez de un menor cuando pide un cambio de sexo?

-Ese es otro error de la ley. Esas decisiones de tratamientos quirúrgicos y hormonales no deberían hacerse en función de la madurez, porque uno puede ser maduro pero estar intoxicado por algo y dejar de serlo. El tema es que no haya una patología de base que esté causando ese deseo o verbalización.

-¿Y qué alternativa hay?

La alternativa es una buena evaluación psicológica y psiquiátrica, que se pueden hacer y se hacen en países como Holanda, que diga si realmente esa persona es trans o dice ser trans porque está motivado por alguna patología de base.