El PSOE se rebela contra la ley de la Infancia de Iglesias porque «se olvida de las niñas»
La dirección socialista cree que la ley Rhodes es un «texto legislativo contrario a los derechos de las mujeres»
Una ley social de Podemos vuelve a provocar un cisma entre el PSOE y el partido morado del Gobierno. Primero, en los últimos días de febrero, fue la «ley sexual del solo sí es sí», cuando Irene Montero y Juan Carlos Campo, titulares ... de Igualdad y Justicia, respectivamente, irrumpieron en una fuerte bronca a cuenta de los términos jurídicos que el Ministerio de Montero había plasmado en su anteproyecto. Campo acabó cediendo, a pesar de su oposición como magistrado al encaje de la norma, y la llegada del anteproyecto de Montero al Consejo de Ministros se produjo el 3 de marzo.
Ahora, es la ley Rhodes . Esta Ley de Protección integral a la Infancia y la Adolescencia aprobada ayer en Consejo de Ministros y presentada posteriormente por el vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, está levantando un importante revuelo nuevamente entre los dos socios de la coalición. En el principal partido del Gobierno hay un argumentario completo, firmado por una cohorte de dirigientes socialistas, pidiendo modificarla en el trámite parlamentario para combatir específicamente la violencia contra las niñas y eliminar el borrado de las mismas.
El PSOE ha lanzado este argumentario a sus cuadros y militantes en el que manifiesta de manera rotunda que « el denominado derecho a la libre determinación de la identidad sexual o derecho a la autodeterminación sexual carece de racionalidad jurídica». Las mujeres del PSOE que suscriben este argumentario cargan de esta manera contra un texto legislativo, que piden no llegue así al Consejo de Ministros, porque es « contrario a los derechos de las mujeres» y «contradictorios con el posicionamiento feminista» de defensa de estos derechos. También anima a los socialistas a revisar todas las leyes autonómicas «que vulneran derechos de las mujeres basados en el sexo».
[ Lee el argumentario completo del PSOE ]
La Dirección Federal del PSOE ha elaborado este argumentario en el que avisa a su socio Podemos: «Si se niega el sexo, se niega la desigualdad que se mide y se construye en base a este hecho biológico». En este argumentario, que elaboró el PSOE ayer martes de urgencia, no se menta específicamente a Podemos, pero aducen a que sus socios de gobierno están intentando introducir por la puerta de atrás la denominada teoría Queer, con amplia aceptación en el movimiento LGTBIQ, que abogan por la desaparición progresiva del sexo como elemento de identidad para que sea sustituido por el género como opción individual.
La dirección socialista cree que « a las mujeres las matan por nacer mujeres, a las niñas les mutilan losgenitales , por nacer mujeres las asignan socialmente la responsabilidad de los cuidados, por nacer mujeres las casan forzosamente y las cercenan la voluntad individual, por nacer mujeres les niegan el derecho al voto, les impiden acceder a recursos y sufren los índices más altos de pobreza o precariedad, etc. En esta desigualdad estructural que supone el sexo, se basa la discriminación, la violencia machista y la ausencia de reconocimiento pleno de la ciudadanía de las mujeres y niñas».
Así, a través del partido y de la ONG denominada Alianza contra el borrado de las mujeres , de la que forman parte dirigentes y ex dirigentes socialistas, denuncian que el área de gobierno dependiente de Iglesias, encargada de redactar la llamada ley Rhodes, por el pianista británico que denunció en su día haber sufrido abusos sexuales que inspiró a Pedro Sánchez a promoverla, ignora la violencia sexual específica que sufren ellas desde el nacimiento « y el mayor impacto que sobre éstas tiene la violencia sexual» , dentro y fuera de la familia.
Estas son las cuatro argumentaciones por las que las socialistas creen que la ley Rhodes está mal definida y lo llaman «teorías que niegan la realidad de las mujeres»:
1-. El sexo es un hecho biológico y el género una construcción social.
2-. El género es la construcción social del sexo biológico con el que se nace.
3-. El género es una herramienta analítica que está siendo ahora utilizada por determinados movimientos para sustituir el propio concepto de sexo. Si el género sustituye al sexo se desdibuja la situación de desigualdad estructural de las mujeres respecto a los hombres. Es una categoría de análisis que lleva implícita la opresión, la desigualdad y la subordinación de las mujeres respecto de los hombres. Por ello, las socialistas feministas pretendemos su abolición para conseguir la emancipación de las mujeres.
4-. A las mujeres las matan por nacer mujeres. Si se niega el sexo, se niega la desigualdad que se mide y se construye en base a este hecho biológico.
Para las dirigentes socialistas, se está manippulando interesadamente el concepto «identidad sexual o de género»: y distingue: «La identidad sexual es un término consolidado que viene a definir cómo una persona se siente con respecto a su cuerpo, y si hay, o no, una correspondencia entre el sexo biológico con el que se nace y aquel con el que siente identificada. Cuando no es así, se trata de lo que conocemos como transexualidad». Y la «identidad de género, término más reciente, se lleva a cabo al margen del sexo biológico y no presenta una disconformidad con el mismo, es decir, pueden sentirse mujeres con un cuerpo de hombre, o viceversa».
El PSOE recuerda que hay normativas para recoger esta distinción, en concreto, la Ley 3/2007, de 15 de marzo, reguladora de la rectificación registral de la mención relativa al sexo de las personas, habla de «identidad de género». La sentencia del Tribunal Constitucional (99/2019, de 18 de julio de 2019., que habla indistintamente de “identidad sexual” y de “identidad de género”. Del mismo modo, las leyes autonómicas relativas a igualdad de trato y no discriminación, utilizan ambos términos. En la Unión Europea, aparece en el propio Convenio de Estambul en su artículo 4.3 y ONU Mujeres lo recoge en varios de sus textos.
«En los últimos tiempos -lamenta el PSOE- se está generado una utilización interesada (por parte del activismo queer), que está ganando terreno en espacios académicos y ciertos movimientos sociales, en torno a la utilización de ambos términos y con la incorporación de nuevos conceptos ambiguos. Las consecuencias de manipular confusamente dichos términos están poniendo en riesgo el propio concepto jurídico y sujeto político muj er».