El Papa recuerda de nuevo a las víctimas de los atentados en España

El mismo jueves pocas horas después del mortal atropello en Las Ramblas, a través del portavoz de la Santa Sede, Greg Burke, el Papa Francisco envió un primer comunicado en el que aseguraba sus oraciones y su cercanía al pueblo español y también indicaba su preocupación por el devenir de los acontecimientos en la ciudad condal. Este viernes por la mañana, horas después del segundo atentado en Cambrils , el Papa envió un telegrama al cardenal Juan José Omella, arzobispo de Barcelona, en el que expresaba su condena a esta «violencia ciega», una «ofensa gravísima al Creador». Además, hacía llegar a través de este telegrama su más profundo pesar por las víctimas de esta «inhumana acción», por las que ofrecía oraciones para su descanso eterno. Este sábado por la mañana repetía su mensaje de condolencias mediante un tuit en los nueve idiomas de su cuenta Pontifex: « Rezo por todas las víctimas de los atentados de estos días. ¡Que la violencia ciega del terrorismo no encuentre lugar en el mundo!».

El Pontífice ha estado muy pendiente de lo que está sucediendo en España y en otros lugares del mundo donde, en los últimos días, también se han producido o tros ataques de corte terrorista . En Burkina Faso, en Uagadugú, el pasado domingo hombres armados irrumpieron en un café del centro de la capital y asesinaron a 18 personas a sangre fría, un ataque terrorista con la firma de Al Qaeda en el Magreb Islámico. En Finlandia , este viernes, un joven apuñaló a diez personas causando dos muertos y ocho heridos en lo que se está investigando como una acción terrorista.

El Santo Padre, en su llamamiento de este domingo a la paz, ha reiterado su oración por «los difuntos, por los heridos y por sus familiares» y, sobre todo, ha suplicado a Dios «que libere al mundo de esta violencia inhumana». A continuación, y visiblemente conmovido, el Papa ha invitado a los 10.000 fieles congregados en la plaza de San Pedro a orar en silencio por estos muertos inocentes y ha rezado un Avemaría.

En el apartado más catequético del Ángelus, el Santo Padre ha explicado que Dios sale a la ayuda de las personas que lo invocan cuando lo necesitan. Ha reflexionado en torno al pasaje evangélico de la mujer cananea que, en el camino de Tiro y Sidón, pide ayuda a Jesús para que cure a su hija. El Papa ha explicado que Dios no abandona a nadie, aunque aparentemente no se note su presencia. Solo hace falta ser constante e insistente: «El Señor no mira a otro lado frente a nuestras necesidades y, si a veces parece insensible a nuestra petición de ayuda, es para poner a prueba y fortalecer nuestra fe». El Papa Francisco ha pedido a los fieles que, en una situación tal, no desesperen, “tenemos que gritar, «¡Señor, ayúdame!», concluyó. Por último, ha señalado que esta historia del Evangelio es muy útil para entender que es necesario “crecer en la fe y fortalecer nuestra confianza en Jesús”, quien puede ayudarnos “a reencontrar el camino cuando hemos perdido nuestra brújula, cuando el camino no parece llano sino áspero y arduo, cuando es difícil ser fieles a nuestros compromisos».