Por qué no llueve este año en España: el fenómeno de la Niña procedente del Pacífico tiene la explicación

«Lo que tenemos ahora es un anticiclón que lleva 40 días sobre nosotros y que incluso va a seguir algunos días o incluso semanas más. Esto se debe a unas condiciones atmosféricas relacionadas con el fenómeno de la Niña , que suele provocar años más secos en España», según explica en una conversación con ABC Jorge Olcina, catedrático de Análisis Geográfico Regional y director del Laboratorio de Climatología de la Universidad de Alicante.

Normalmente en el Pacífico se habla del fenómeno contrario, el Niño , que provoca que el agua de las costas de Sudamérica se caliente y se produzcan lluvias, inundaciones y otros desastres naturales. No obstante, la situación actual es la opuesta, ya que las aguas de este océano se están enfriando más de la cuenta y no hay precipitaciones.

La Niña altera toda la situación atmosférica del planeta y también trae sus coletazos a Europa occidental . Concretamente, según apunta Olcina, «los años que hay Niña suelen ser más secos en los que cuesta que se desarrollen lluvias, las borrascas se retrasan y es lo que está ocurriendo ahora». Además, el experto asegura que «fenómeno está bastante activo en el Pacífico, pero está alterando toda la circulación atmosférica del planeta y en el hemisferio norte, en nuestra zona en concreto, genera más condiciones anticiclónicas de lo normal».

Afortunadamente «esto no va a ser eterno» y Olcina espera que «lo importante es que a finales de febrero o marzo cambie la dinámica atmosférica y empiecen a entrar borrascas y llueva».

A día de hoy, España está sufriendo el inicio de año con menos lluvias desde 2005.

Mientras tanto, el climatólogo insiste en que este tipo de situaciones «nos obligan a repensar nuestra gestión del agua, especialmente en territorios del interior peninsular que no tienen posibilidad de conectarse a una desaladora para producir agua». En concreto, Olcina señala como una posible solución construir depósitos de mayor capacidad para abastecer las ciudades. No obstante, «hasta que no cambie la dinámica atmosférica en las próximas semanas, difícilmente vamos a poder solventar estas condiciones de sequía», indica.

Con la falta de precipitaciones, resurgen teorías conspirativas que apuntan hacia los 'chemtrails', también conocidos como estelas químicas, que podrían modificar las nubes de forma artificial para impedir la lluvia. Olcina lo tiene claro y asegura que «lo que estamos viviendo ahora en España no se debe en absoluto a esto».

«Las modificaciones artificiales de la atmósfera se llevan realizando desde los años 40 del siglo pasado con dos objetivos: mitigar el granizo y desviar grandes tormentas para evitar desastres naturales», explica el climatólogo.

Sin embargo, son operaciones con un alto coste económico, con una escasa base científica y cuyos resultados son contraproducentes en la mayoría de los casos, según Olcina.