Más publicidad que adhesiones en los dos ayuntamientos que aplican las bajas menstruales

Fuentes municipales del Ayuntamiento de Gerona explican a ABC que desde la puesta en marcha de esta iniciativa, aprobada en junio de 2021 y plenamente en vigor este año, seis trabajadoras (de 533, la mitad de la plantilla) lo han solicitado. En total, se han acogido a 30 horas y 33 minutos de este permiso, una cifra que desde el consistorio creen que podría haber sido más elevada si en esta época no hubiera estado implantado el teletrabajo por el Covid.

Su normativa ofrece ocho horas al mes (o la parte proporcional correspondiente a una jornada reducida) por indisposición menstrual. Estas horas disponibles, que tienen que estar autorizadas por un responsable, se pueden coger en fracciones mínimas de una hora y recuperarse en un periodo máximo de tres meses . Lo pueden solicitar todas las mujeres, hombres trans o personas no binarias del ayuntamiento. La medida la propuso el equipo de gobierno (JpC y ERC) a partir de la Mesa General de Negociación con los sindicatos y quedó aprobada en una votación nominal que contó con el apoyo de los ediles, menos uno de Cs.

Fuentes sindicales, en cambio, dicen a este periódico que si solo ha habido seis casos es porque cuentan con «alternativas más rentables» para aquellas mujeres que sufran dolores por la regla, como son días por indisposición que no tienen que cubrirse más adelante o la opción del salario retornable.

Precisamente, con el espejo de Gerona y con las mismas condiciones, el Ayuntamiento de Castellón incluyó este permiso en su convenio colectivo en septiembre pasado. Las mujeres deben adjuntar un informe médico con una validez de dos años. Sin embargo, tal y como confirma el consistorio a este diario, ninguna de sus cerca de 600 trabajadoras se ha acogido al derecho en los cinco meses que lleva en vigor. Los sindicatos no han recibido quejas al respecto. Rosana Seguer , funcionaria en el consistorio y delegada de Personal e Igualdad de UGT, achaca esta situación a la saturación de las consultas de los especialistas.

«Se ha informado a todo el mundo, pero hay retrasos de más de cuatro meses para tener cita con el ginecólogo y muchas compañeras no han podido pedir el informe, por eso no se han acogido», justifica. «Cuando empiezan los dolores, el médico de cabecera, que no conoce los convenios laborales, directamente les hace un justificante de reposo domiciliario de 24 a 48 horas que no tienen que devolver. Estamos trabajando en que el permiso no sea recuperable, máxime cuando hay un certificado sobre la mesa», dice Seguer.

Otro ayuntamiento castellonense, el de Burriana , tiene previsto poner en marcha este permiso -en los mismos términos- a finales de año, tras ser aprobado dentro de su Plan de Igualdad. Por su parte, Las Naves , un centro de innovación que pertenece al Ayuntamiento de Valencia, también lo aplica desde hace pocas semanas a sus 26 trabajadoras, el 66% del total de la plantilla.