El Papa: «¡Matar en nombre de Dios es un gran sacrilegio!»
En su visita a Albania, el Pontífice pide una religión auténtica, que sea «fuente de paz, y no de violencia»
El Papa: «¡Matar en nombre de Dios es un gran sacrilegio!»
En respuesta directa a quienes usan la religión para justificar sus matanzas, el Papa Francisco afirmó en Albania que «la religión auténtica es fuente de paz, y no de violencia». Con gran fuerza insistió: «¡Nadie puede usar el nombre de Dios para cometer violencia! ¡Matar ... en nombre de Dios es un gran sacrilegio!». Su primera visita a un país europeo dura solo un día pero está resultando muy intensa .
El encuentro del Papa con los líderes de las seis principales comunidades religiosas de Albania tuvo un sabor casi familiar. Con casi el 60 por ciento, los musulmanes constituyen la mayoría del país, pero la mayor parte aprecian mucho al Papa Francisco y están muy orgullosos de su visita. Se lo dijo el propio presidente, Bujar Nishani, que es musulmán.
El segundo grupo religioso en Albania son los cristianos. Los católicos suponen un 16 por ciento de la población, y los ortodoxos, establecidos sobre todo en el sur, un 7 por ciento . Hay también bektashis, judíos y un buen número de ateos, herencia de los años de ateísmo oficial y persecución religiosa durante la larga dictadura de Enver Hoxha .
Durante el encuentro con los líderes religiosos, celebrado en la Universidad Católica «Nuestra Señora del Buen Consejo» de Tirana, el Papa habló de respeto a los demás, pero sin esconder las propias creencias.
Al margen del texto escrito les dijo que « es muy importante dar testimonio de la propia identidad, sin fingir otra, pues eso sería relativismo ». En esa línea de claridad, añadió que «el diálogo teológico entre religiones está bien, pero todavía más importante es caminar juntos, sin enmascarar la propia identidad». Es lo que sucede en Albania, donde los fieles de todas las religiones trabajan juntos sin que la confesión religiosa sea un problema en la vida social o en la vida política.
Al final, el Papa les hizo reír diciendo que la convivencia religiosa debe vivirse «con sentido del humor. En realidad somos, junto con los demás, un equipo de hermanos».
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