recortes en reino unido
«Sr. ministro: demuestre que puede vivir con 53 libras a la semana»
Unas 400.000 personas han firmado ya una petición digital para que el titular británico de Trabajo y Pensiones haga realidad sus polémicas declaraciones sobre los recortes sociales
«Sr. ministro: demuestre que puede vivir con 53 libras a la semana»
El ministro británico de Trabajo y Pensiones desaprovechó este lunes una oportunidad preciosa para permanecer callado y no dejarse enredar por un hábil presentador de la radio BBC 4. Pero el siempre cortés y encendido flujo de preguntas y respuestas entre políticos y periodistas en ... el Reino Unido le llevó a comprometerse públicamente a lo imposible. Ahora, unas 400.000 personas han firmado en 48 horas una petición que exige a Ian Duncan Smith que «demuestre que puede vivir con 53 libras (62 euros) a la semana».
El titular de Trabajo dijo que podría vivir como un vendedor ambulante
El titular de trabajo y Asuntos Sociales ha sido el peso pesado del Ejecutivo que preside David Cameron encargado de dar la cara para justificar la histórica oleada de recortes en el Estado del Bienestar británico que entra en vigor este mes. Y ha terminado crucificado –digitalmente– por ello. Un vendedor ambulante denunció el lunes en la emisora que la reducción en las ayudas a la vivienda que recibía le obligaba ahora a vivir con 53 libras a la semana.
«He estado dos veces en paro»
«¿Podría usted vivir con 53 libras por semana?», le preguntó más tarde el presentador al ministro conservador. «Sí, si tuviera que hacerlo», contestó Duncan Smith. Inmediatamente se lanzó una petición online en la plataforma change.org en la que instan al ministro a «que viva con este presupuesto al menos durante un año». Según explica el promotor, «significaría una reducción del 97% en sus ingresos actuales, que ascienden a £1,581.02 por semana o £225 al día después de impuestos; esto permitiría hacer realidad el mantra del Partido Conservador, "estamos todos juntos en esto"».
El ministro de Trabajo se defendía este miércoles calificando la movilización digital de «ardid que distrae la atención de unas reformas sociales mucho más importantes, y por las que he trabajado duro», según ha declarado a un diario local . «He estado en paro dos veces en mi vida así que ya lo he hecho, y sé lo que es vivir al límite de la pobreza», asegura.
En 1981, cuando Gran Bretaña atravesaba la gran recesión de los primeros años de Margaret Thatcher, Duncan Smith abandonó las Fuerzas Armadas y se quedó en paro. A finales de la década, el hoy ministro habría perdido su trabajo como director de marketing de una inmobiliaria. «Fue un shock, horrible, me sentía patético, y recuerdo mirarme con mi mujer y decir, qué vamos a hacer para conseguir dinero», explicó en su día a «The Daily Mail». Sus críticos recuerdan esta semana que su mujer es hija de un aristócrata inglés y que enviaron a sus hijos a Eton, uno de los colegios privados más elitistas –y caros– del Reino Unido. En 2002, el matrimonio se mudó con sus suegros... a una casona del siglo XVII en Buckinghamshire.
La polémica se ha personalizado en la vida privada de Duncan Smith en medio de una reducción histórica del modelo social británico. Desde el 1 de abril, el gobierno ha implantado el conocido como « impuesto del dormitorio », que reduce considerablemente las ayudas a la vivienda a quienes tengan alguna habitación no ocupada en la casa.
Los «tories» cuestionan la versión del vendedor
En el caso concreto de David Bennett, el vendedor ambulante de 51 años que denunció su caso en BBC 4, un influyente parlamentario conservador le acusa de haber falsificado las cifras y asegura que vive con 156 libras (183 euros) semanales, y no 53, si se suman las distintas prestaciones a las que tiene acceso, según recoge « The Daily Telegraph ». El diputado Dominic Raab exige a la BBC que explique si se verificó la versión de Bennett, que perdió su empleo de gestor de créditos en un fabricante de motores. Bennett se definía en su cuenta en Twitter como «jugador de póker», pero lo habría cambiado esta semana a «vendedor ambulante», según denuncia « The Daily Mail ».
Los recortes en las ayudas a la vivienda podrían afectar a casi 700.000 familias, mientras que algunos cálculos estiman que 80.000 familias podrían quedarse en la calle cuando entre en vigor a mediados de este mes una de las medidas de ahorro más controvertidas del gobierno que preside Cameron: la imposición de un tope en las prestaciones sociales que pueden recibirse equivalente a la renta media anual después de impuestos, que está establecida en 26.000 libras (casi 30.000 euros).
Tanto la iglesia anglicana como la oposición laborista han sido muy críticos con los recortes sociales impuestos por el gobierno, que los justifica como un intento de garantizar la viabilidad del modelo social. «Estamos dando a los receptores de ayudas las herramientas que necesitan para volver a trabajar, en lugar de atraparles en la dependencia», defendían el ministro de Finanzas, George Osborne, y Duncan Smith en un artículo esta semana. Algunos de estos recortes, según los planes adelantados por el propio Cameron, afectarán a los inmigrantes comunitarios, incluidos los españoles.
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