Dani D’Utrera, un cantaor flamenco que ha hecho sus pinitos como actor

Nació en la calle Santa Clara y cuando solo tenía dos o tres años su madre se las veía y se las deseaba para que no se escapara y tomara el camino hacia la libertad. La sangre flamenca le llega desde diferentes ramas , su abuelo materno era conocido como Andrés «El Cocinero» y su abuelo paterno Diego «El Penalty». Por eso desde muy joven sintió como en su interior pasaban cosas distintas y que su compás innato le hacía improvisar tanguillos y arrancarse a bailar.

«Desde muy pequeño cantaba y bailaba de una manera innata, en un primer momento era simplemente una forma de divertirme . Estoy muy agradecido a los profesores que he tenido, pero mi forma de ser me ha impedido siempre mantener el ritmo de una academia», explica el utrerano.

Muy pronto comprendió que su forma de ser y su arriesgada forma de entender el arte lo obligaban a superar los horizontes de Utrera, así ha pisado escenarios de medio mundo, aprendiendo algo en cada una de estas aventuras. A pesar de ello tiene un lugar muy especial en su corazón para su tierra , al afirmar que «me siento muy orgulloso de cómo me quiere Utrera, la gente ha entendido que por mis poros cuando canto, lo que sale es Utrera y que la gente me dé mi sitio es lo único firme que tengo en mi vida».

En los últimos años este utrerano ha compaginado su faceta de cantaor flamenco con sus pinitos en el mundo de la interpretación. En este sentido participó en una decena de capítulos de la popular serie «Los Hombres de Paco» , mientras que también ha sido actor en distintos videoclips y spots publicitarios. Es un mundo que le encanta y no descarta en un futuro tomar parte en alguna película de cine independiente. También ha hecho sus escarceos en el mundo de las «performance» artísticas, donde se dan la mano diferentes formas de expresión artística para tratar de conseguir una percepción distinta en el espectador. «En el fondo soy una persona muy íntima y reservada, por lo que este tipo de formas de expresión me han servido para tratar de vencer el respeto que impone siempre subirte a un escenario», explica el utrerano.

En la actualidad acaba de llegar a Utrera procedente de Lyon, donde ha participado en un espectáculo flamenco en la Ópera de esta ciudad francesa y está enfrascado en numerosos proyectos a lo largo y ancho de la geografía nacional, convirtiéndose de pleno derecho en uno de los principales representantes del cante flamenco utrerano . Reconoce que le gustaría algún día poder grabar un disco, pero es un trabajo que no le hace especial ilusión si para ello tiene que cambiar su personalidad y su forma de entender el arte.