Más de 30 concejales han abandonado sus partidos en esta legislatura

El último municipio donde se ha dado uno de estos casos ha sido Espartinas. El pleno espartinero ratificó el pasado lunes la formalización de la salida del grupo popular del ex alcalde, Domingo Salado, y del concejal Juan Pedro Corrales. Ambos pasarán a ser ediles no adscritos, al igual que José Antonio García, el que fuera portavoz y secretario general de la agrupación socialista, que decidió abandonarla en marzo . A ellos se unirá, tal y como anunció después de la sesión plenaria, el hasta ahora hasta concejal socialista Antonio Miguel Galicia , que achaca su salida a graves diferencias internas en el grupo, que se queda con tan solo dos ediles, la mitad de los que obtuvo en las elecciones municipales de 2015.

Con estos cambios en el seno de la corporación espartinera, el grupo de ediles no adscritos se convierte en el más numeroso de la oposición , con cuatro concejales a los que, se espera, se una Iván Gómez, ex teniente de alcalde y ex alcalde accidental durante la baja de la alcaldesa, que ha denunciado a sus compañeros de C’s por «acoso». A todo esto hay que sumarle las diversas renuncias sucedidas tanto en el seno de Ciudadanos como en el del Partido Popular, así como los cambios en la alcaldía, que han convertido a Espartinas en la localidad con más agitación política en esta legislatura.

En Palomares del Río, por su parte, la división interna del PP entre los seguidores de la actual presidente provincial, Virginia Pérez, y los de Juan Bueno, llevó a una moción de censura contra la alcaldesa popular, Lola Rodríguez, y a que el edil Alejandro Romero pidiese su baja en el grupo popular. Además de continuar como concejal no adscrito, ha anunciado que se presentará como candidato a la Alcaldía en las próximas elecciones por el partido Contigo Somos Democracia (CSD).

En Valencina, una frustrada moción de censura contra el PSOE llevó a José Daniel Domínguez, de Izquierda Unida, y a Nuria Jiménez, Lourdes Novella y Araceli Espinosa, expulsadas por el Partido Popular, a formar parte del grupo de no adscritos . También en La Rinconada, el único concejal que el PP obtuvo en las elecciones, Ángel Seisdedos, abandonó el grupo popular pocos meses después de los comicios.

Otro de los municipios con más movimiento político en los últimos años es Dos Hermanas , donde el PP se ha quedado sin su candidata a la Alcaldía, Cristina Alonso, que figura en el grupo de no adscritos junto a Luis Gómez, expedientado por el partido, y Estrella Guzmán, que llegó a ser la número uno del grupo municipal de Sí se Puede.

Ciudadanos es, tras el Partido Popular, el segundo partido que más «fugas» de ediles ha tenido desde las elecciones. El caso más llamativo es el de Carmen López, concejal en Castilleja de la Cuesta, que vivió protagonizó numerosos casos de tensión con la formación y decidió ir por libre. En Tomares, el único edil naranja, Faustino Rodríguez, disolvió el grupo municipal de Ciudadanos hace casi un año, pasando al grupo de no adscritos.

A esta misma figura se han acogido Juan José Jurado, en Camas y Sonia Vallejo, en Gelves, todos afines a la nueva formación Contigo Somos Democracia . En el municipio gelveño también está como edil no adscrito Felipe Campos , que se presentó por Reacción Gelveña, agrupación cercana a Podemos, y que forma parte del equipo de gobierno.También la única concejal de C’s en La Algaba, Cristina Bazán, es actualmente concejal no adscrita tras desligarse del partido en 2015.

Por otro lado, el Partido Socialista ha vivido su caso más grave en Los Palacios, donde se quedó sin grupo municipal, pasando sus tres concejales, Ana Belén Gayango, Juan Manuel Curado y Almudena Rivera al grupo no adscrito por una marcha causada, explicaron, por «trato vejatorio» por parte del secretario general de la agrupación local del PSOE. La ex concejal del grupo socialista Blanca Fuentes, en Bollullos de la Mitación, también ejerce de edil no adscrita, aunque forma parte del equipo de gobierno.

En Alcalá de Guadaíra, la que fuera número uno de la lista de Alcalá Puede, Jésica Garrote, fue expulsada de su grupo y va por libre , al igual que Ester Ruiz, ex portavoz de C’s, y Juan Luis Rodríguez, que se presentó a las elecciones por Izquierda Unida-Alternativa Alcalareña y terminó siendo, también, expulsado del grupo municipal. De otro lado, en Guillena, Javier Pisonero, ex edil de Guillena Sí se Puede, es el único miembro del grupo de no adscritos, al que llegó después de un polémico voto con el que evitó que un acuerdo de IU y PP arrebatase la alcaldía al Partido Socialista.

Y, por último, Santiponce tiene dos concejales no adscritos , Miguel Ángel Gil, ex primer teniente de alcalde de IU, y José Fabio Herrera, que formó parte del grupo municipal del PA, partido que también ha vivido la marcha de un concejal en Constantina, Sonia Ortega.