Consternación en la hermandad de Valme por la muerte de una de sus vocales

Se da la circunstancia de que Magdalena estaba casada con el que era hermano mayor de Valme hasta hace algo más de un año, Francisco Díaz Terrero, quien ostenta en este mandato el cargo de tesorero. En la actualidad, la fallecida era vocal de la Junta de Gobierno, aunque en el pasado ejerció también las funciones de tesorera y contadora para la hermandad. « Siempre estaba para todo lo que se le pedía », han recordado allegados a la Junta de Gobierno de Valme.

Aquejada de problemas cardiacos desde hacía años, su salud había empeorado en los últimos días obligándola a ser hospitalizada por una recaída de la que no ha podido recuperarse. Su muerte ha sembrado de tristeza la actividad, casi frenética, que se vive durante estos días en la casa hermandad y las naves del Ave María, donde se prepara la romería y, de hecho, las instalaciones permanecieron cerradas en la noche de este pasado miércoles tras conocerse la triste noticia.

Magdalena Romero tenía dos hijos, Magdalena y Francisco. Durante su juventud trabajó en la farmacia de Manuel Poyato, ubicada en la avenida Reyes Católicos de Dos Hermanas. La última vez que acudió a un acto oficial de la hermandad de Valme fue el pasado 9 de septiembre, cuando se presentó el cartel anunciador de la romería .

« Era de hermandad diaria », han destacado de ella sus amigos de Valme, quienes le han dado el último adiós este jueves por la tarde en la parroquia de Santa María Magdalena, donde se ha celebrado el sepelio por su muerte. El cortejo fúnebre, acompañado por el estandarte enlutado de la hermandad, se ha detenido también en la capilla del sagrario, donde se rinde culto a la Santísima Virgen de Valme.