De paseo por la ciudad que amó y criticó Cervantes

Hay que recordar que durante la década de 1587 a 1597 el más importante escritor de la literatura hispánica residió en el Reino de Sevilla, viviendo una dura experiencia por los pueblos de la campiña (Écija, Carmona, Marchena o Estepa) como recaudador de impuestos y mercancías para Armada Invencible de Felipe II. A

finales de 1597, Cervantes daría con sus huesos en la Cárcel Real de Sevilla , en la calle Sierpes, donde aprendería el lenguaje del hampa que luego plasmaría en sus obras.

Numerosos lugares de la ciudad sirvieron de escenario a algunas de sus obras más importantes, c omo las ‘Novelas Ejemplares de Rinconete y Cortadillo’ o ‘El Coloquio de los perros ’. La plaza del Salvador, el entorno de la Cuesta del Rosario y Alcaicería, la antigua Carnicería de la Alfalfa o la plaza de San Francisco, inspiraron sus relatos.

El paseo también visitará el epicentro económico de la bulliciosa y caótica Sevilla del siglo XVI, con paradas en las gradas de la Catedral, «enclave comercial donde se daban citas personajes, pícaros y maleantes de todo tipo», según apuntan desde Ispavilia. También se evocará el desaparecido Corral de los Olmos -hoy plaza Virgen de los Reyes- , lugar donde se regía el gobierno de Sevilla hasta la construcción del nuevo ayuntamiento en 1533; y «la impresión que le causó la construcción del nuevo campanario de la Giralda que plasmaría en su obra magna ‘El Quijote de la Mancha’». Pero habrá más sorpresas. ¿Dónde se situaba la casa donde Cervantes vivió en Sevilla?

Estos pasos cervantinos seguirán por el Arenal, el Baratillo, o la Casa de Monipodio en Triana, «cueva de ladrones», situada en el desaparecido Puerto de Camaroneros junto al Molino de la Pólvora, en la calle Troya. En definitiva, u na ocasión para revivir la ciudad que vio, amó y criticó el Príncipe de los Ingenios. La entrada es a 12 euros, con aforo limitado debido al Covid-19. Más información en http://ispavilia.com/la-sevilla-de-cervantes.