A por el Giraldillo de Oro

Un completo panorama fílmico con películas que tienen en común la creatividad , la energía, la búsqueda de lenguajes propios , un bullicioso dinamismo que huye de lo convencional, y una lúcida diversidad cultural. Algunas de ellas llegarán tras ganar premios en festivales como Venecia o Berlín , o con la Cannes Label , la etiqueta de un certamen que la pandemia impidió celebrar.

Entre las películas que participarán en la Sección Oficial destacan títulos que respiran compromiso social y voluntad de dialogar desde el presente con episodios convulsos del pasado reciente: ocurre en «Notturno» , el nuevo trabajo de Gianfranco Rosi («Fuego en el mar», «Sacro GRA»), que pone el foco en la vida cotidiana en zonas devastadas por los conflictos bélicos en Oriente Medio.

O en «Queridos camaradas» , de Andrey Konchalovskiy , que cuestiona a un régimen, el comunista, que perpetró salvajadas como la masacre de Novocherkask, con la que las autoridades soviéticas aplastaron una manifestación pacífica de obreros que protestaban contra el desabastecimiento de la población en la URSS de 1962.

O en «Quo Vadis, Aida?» , con la que Jasmila Žbanić viaja al infierno de Srebrenica, en plena Guerra de los Balcanes . O en «El año del descubrimiento» , con la que Luis López Carrasco refleja el clásico sufrimiento de las clases obreras mientras destapa las vergüenzas de aquel mensaje triunfalista que las autoridades clamaban en la España del 92, la de los Juegos Olímpicos y la Expo.

Películas rotundas que proponen caminos poco transitados , como «DAU. Natasha» , de Ilya Khrzhanovskiy y Jekaterina Oertel , que llega envuelta de una enorme polémica y que permitirá empezar a descubrir qué se esconde tras uno de los proyectos más monumentales jamás llevados a cabo por un cineasta. O como «Malmkrog» , de Cristi Puiu , que reflexiona desde el pasado sobre asuntos perennes, como la muerte, el amor, la política y la religión. O como «February» , de Kamen Kalev , que sigue a un mismo personaje en tres momentos vitales muy distintos. O como «Siberia» , del eterno rebelde Abel Ferrara : un viaje alucinante al fondo de la mente del protagonista, encarnado por Willem Dafoe .

Retratos femeninos, como «Karen» , de María Pérez Sanz , centrada en la figura de la escritora Isak Dinesen . O «La vida era eso» , de David Martín de los Santos , con Anna Castillo y Petra Martínez , sobre la amistad de dos mujeres de distintas generaciones que tuvieron que emigrar de España para buscarse la vida.

Insólitas historias de amor, como « Ondina» , de Christian Petzold , o «Ammonite» , de Francis Lee , con una estelar pareja protagonista formada por Kate Winslet y Saoirse Ronan .

Y films sobre asuntos cotidianos, como la adicción a la tecnología en «Borrar el historial» , o sobre el mundo de los influencers en «Sweat» .