Las supuestas mordidas que según el informe de la Guardia Civil se han producido en la adjudicación de las obras de ampliación del puente del Centenario han llegado esta mañana al Pleno del Ayuntamiento de Sevilla. El grupo municipal de Vox ha realizado una ... pregunta al alcalde para saber cómo iba a actuar el Consistorio hispalense ante este presunto caso de corrupción vinculado al PSOE y que afecta en el caso de esta intervención a la capital hispalense. Un debate que han querido evitar desde un principio los concejales socialistas: primero, solicitando la retirada del punto y, con posterioridad, abandonando en grupo el Salón Colón.
Ha sido el portavoz del PSOE, Antonio Muñoz, quien ha pedido la palabra en el Pleno por una cuestión de orden para indicar a la Presidencia que su partido había solicitado la retirada de esta pregunta, considerando que no se ajustaba a ningún asunto relacionado con la ciudad. Frente a ello, el presidente Manuel Alés ha justificado su mantenimiento en el orden del día en el hecho de que la solicitud de los socialistas llegó «en la tarde ayer a las 19 horas», lo que ha provocado que «no haya tiempo suficiente para dirimir esa solicitud, ni pedir un informe a la Secretaría al respecto». Tras recibir estas explicaciones, no contentos con la decisión adoptada, los doce ediles del PSOE han abandonado sus escaños de forma momentánea.
Sin presencia de ningún concejal del PSOE en el Salón Colón, la portavoz de Vox, Cristina Peláez, ha señalado que «el demoledor informe de la UCO sobre la trama de comisiones ilegales vinculadas a las más altas esferas del PSOE» es un caso «escandaloso». Entre otras cosas, por «tejer una red de corrupción basada en adjudicaciones fraudulentas a cambio de mordidas millonarias». Al hilo, ha indicado que «una de estas comisiones ilegales, de unos 450.000 euros, está directamente relacionada con un contrato que afecta a esta ciudad» y sobre la que «el señor Muñoz no ha dicho nada al respecto». Tampoco sobre «la reunión mantenida en 2023 con la señora Leire Díez, conocida como la fontanera del PSOE».
En su turno de intervención, el alcalde José Luis Sanz ha señalado que se están viviendo «momentos grotescos» en España a cuenta de estos casos, aunque ha insistido en que «no creo que la corrupción esté instalada en el PSOE, sino que cuatro presuntos delincuentes se colaron en la dirección del partido». A pesar de ello, y tras asegurar que «tiene que haber militantes del PSOE de toda la vida con ganas de vomitar», ha insistido en que su interés es «lo que afecta a Sevilla». Por eso, «exigí que nos explicaran cómo era posible que gracias a mordidas que salían de esa obra (la del puente del Centenario) se podían pagar el nivel de vida de estos personajes e incluso prostitutas».
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