El IMD garantiza la restitución de cualquier material de San Pablo tras la disolución del Betis Baloncesto

Así quiere hacerlo constar el órgano deportivo dependiente del Consistorio hispalense al objeto de aclarar que más allá de que el dueño del club, Pedro Fernández, pueda hacer una provisión habitual en estos términos de mobiliario, debido a la agónica situación que atraviesa el club, desde el Ayuntamiento insisten en que hay un control pormenorizado de todo el material que pertenece al propio pabellón de titularidad municipal de San Pablo, y al mismo tiempo se afirma que no ha salido ni un balón siquiera hasta la fecha, aunque no descartan que esa situación pueda producirse estos días después de que ya el año pasado se extendiesen los rumores sobre las intenciones del propio presidente, que quiso por ejemplo llevarse elementos como el videomarcador, entre otras cosas.

De hecho, y en caso de que Pedro Fernández busque salida de forma particular al inmovilizado emplazado en ese pabellón de San Pablo tras su marcha definitiva del club, en el IMD instan al gestor de origen madrileño a que éste podrá hacer acopio del material siempre y cuando presente un certificado de titularidad, o en su defecto una factura, con el fin de demostrar que en verdad él es el poseedor de objetos tales como los marcadores, cortinas o mesas, entre el mobiliario del propio pabellón, que han venido acompañando al equipo en una temporada muy exitosa en el prisma de lo deportivo tras el ascenso a la Liga LEB y dramática a todas luces en lo institucional, con esa futura disolución de la que de momento no conta solución a corto plazo.

En caso de que eso ocurra, y si el presidente del Betis Baloncesto deja San Pablo sin alguna de sus piezas fundamentales con las que poder practicar baloncesto de primer o de cualquier nivel, el Ayuntamiento se compromete a restituir cualquier tipo de material de la misma o de mayor calidad a la mayor celeridad posible, en aras de que no se vean afectados otros equipos de baloncesto que suelen utilizar dicho pabellón, como es el caso del Caja 87. Así, en caso de que sean recogidas canastas, el IMD está dispuesto a reponerlas de la misma categoría o superior con el fin de evitar ningún tipo de expolio en San Pablo.