Unos clientes entran en un Zara de Suecia y el dependiente se queda sin palabras con la pregunta que le hacen: «Me quedé blanco»

Cada día, estos trabajadores deben enfrentar situaciones muy variadas, algunas de ellas un tanto surrealistas. En este sentido, deben poner a prueba su empatía y paciencia, además de mantener una actitud lo más amable posible con el cliente.

En este sentido, un joven español que se mudó hace siete meses a Suecia y trabaja actualmente como dependiente de Zara ha contado la sorprendente situación que vivió con unos clientes hace unos días.

«Yo te prometo que pensaba haberlo visto todo, pensaba haber atendido a los clientes más maleducados, pero es que vienen unos nuevos y te sorprenden: la 'digievolución' del cliente maleducado», ha contado en un vídeo publicado en su cuenta de TiKTok (@vcalab) antes de narrar el episodio.

Vin, como se hace llamar en TikTok, cuenta que, cuando «estaba trabajando tranquilamente», se le acercaron una pareja de jóvenes, de unos 24-25 años: «Los típicos que se creen que ya son mayores y que van como 'soy aquí el que manda'».

«Aún me hace gracia porque era una situación tan heavy...», señala el creador de contenido, que cuenta que fue la joven quien se dirigió a él y le hizo una pregunta que le dejó sin palabras: «Me dice la tía: '¿Por qué tenéis este tipo de ropa?'».

«Yo me quedo parado, como pensando 'no la he entendido'», señala el dependiente, que cuenta cómo la joven volvió a repetir la misma pregunta. «Le digo: 'Creo que no te he entendido' con toda mi buena fe y viene y me suelta: «Esto es Suecia, no es Hawái».

El creador de contenido continúa su relato bromeando: «Claro, yo he elegido esta ropa, soy yo el diseñador de Amancio». Y es que, en ese instante, cuenta, «se me descuadró la cara imagino, los ojos se me fueron, no me podía creer que me estuviera preguntando eso».

No obstante, Vin entendió que la joven buscaba ropa más abrigada: «Cuando en Suecia hace un poquito de sol la gente va, si pudiera, en bolas por la calle, que es completamente lícito», explica. Por ello, decidió darle la vuelta a la situación y se ofreció a buscarle chaquetas, abrigos o pantalones largos.

Pero, lejos de calmarse, la situación se volvió más surrealista. «Me corta el novio, que no podía quedarse callado, y me dice 'esto es para prostitutas'. Me quedo yo blanco, la coge a ella y se pira», cuenta el joven español, que critica que la pareja entrara a Zara, por lo que les invita a visitar otras tiendas: «Es que no lo entiendo, por qué entras».

El joven dependiente compartió la anécdota con una compañera, que también «se quedó a cuadros». «¿Tú qué te crees? Que no has trabajado en tu vida. Imagino que su día fue fantástico. Y yo seguí con lo mío. No entiendo, ¿tú te crees que eso es real? En fin, no puedo más», concluye.