Casi cualquier cosa puede pasar en el arte moderno, por lo que podemos entender por completo lo que les pasó a unos limpiadores de una sala de exposiciones, que, tras confundir una pieza exhibida con los restos de una fiesta, decidieron arrojarla a la ... basura . Sucedió en el Museo Bozen-Bolzano del norte de Italia, donde se exhibían una serie de botellas de champán vacías con confeti alrededor.
Ha sido la propia galería la encargada de avisar a sus visitantes del incidente mediante un cartel informativo, y ha avisado de que la escultura volverá pronto tras ser restaurada, según informa «The Lad Bible».
Desde la institución también confirmaron que no es la primera vez que los productos de limpieza han acabado con alguna de las obras de arte que han ocupado antes sus salas. Todo un peligro para los jovenes que prestan sus trabajos con la ilusión de ser vistos, no para que acaben en la basura tras un despiste.
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