Jorge Javier Vázquez reaparece en el estreno de 'Cuentos chinos' sin pelos en la lengua y se sincera sobre su baja médica

«Querido Pablo». Así empezaba una carta en la que Jorge Javier se dirigía a Pablo Motos. A través de su perfil de X (el recién renombrado Twitter), el presentador estrella de Mediaset se presentaba esta misma tarde como el «nuevo vecino, el de la acera de enfrente» del conductor de 'El Hormiguero'. «Vengo a convivir contigo. Es que llevas tantos años solo a esas horas de la noche que me he dicho: 'oye Jorge, vete a hacerle un poquito de compañía'», añadió en su mensaje. Citando a Andreu Buenafuente, Vázquez concluyó su recado a Motos recordándole que «la gente de nuestro oficio no competimos, coincidimos».

Como ya adelantó Mediaset, 'Cuentos chinos' pinta a show coral, colorista, explosivo y cuya ambientación y estética está inspirada en la cultura milenaria china. Su objetivo: revolucionar la televisión a base de diversión y buen humor. Además de colaboradores como Susi Caramelo, Anabel Alonso, Antonio Castelo, Virginia Riezu, Josep Ferré, Athenea Pérez o Germán González, el nuevo proyecto producido por La fábrica de la tele contará en cada entrega con un invitado.

La principal diferencia con el formato de Antena 3 (que para competir con el regreso de Jorge Javier recibió a Olga Carmona) es que el entrevistado de la noche en 'Cuentos chinos' fue un misterio hasta la propia emisión.

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Un Jorge Javier dispuesto a servir 'show' inauguró el programa asegurando sentirse  encantado «de estar en un plató tan rojo, y en el que cada noche vuestro amado líder se dirigirá a vosotros para deciros lo que tenéis que pensar», arrancó con su natural mordacidad y con un atuendo que recordaba al que luce Kim Jong-un, líder supremo de Corea del Norte (un claro guiño a sus detractores, que lo llaman 'el pequeño dictador'). Después se desmintió a sí mismo explicando al público que su intención no es adoctrinar. «Por primera vez le haré caso a mi padre, que me decía, 'Jorge, no te metas en política'», señaló.

Hechas las presentaciones del nuevo formato, el comunicador anunciaba la visita de un invitado que después de mucho tiempo en silencio acudía a 'Cuentos chinos' dispuesto a dar todas las explicaciones. La bomba es que se trataba de él mismo. Susi Caramelo era la primera colaboradora en aparecer y la encargada de preguntarle a Jorge Javier por cómo ha vivido estos meses retirado de la pequeña pantalla.

Él se remontó al pasado 18 de mayo, día que acabó en urgencias por una subida de tensión. «Nadie acaba en urgencias porque sí. Me di cuenta de que no podía seguir tirando de mí. Tomé la decisión acertadísima de parar», detalló.

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Problema de salud que coincidió con los cambios en Mediaset y la cancelación de 'Sálvame', como el catalán reconoció. «Todo el mundo sabe que en esta empresa se estaba viviendo una transición, que fue especialmente dolorosa».

«He pasado por muchos estados de ánimo durante la baja médica: rabia, ira, desengaño... Durante ese tiempo fui capaz de atar cabos. De saber qué ocurrió. No olvido, pero tengo que decir que vuelvo sin ningún tipo de ánimo revanchista», continuó. Además de agradecerle el apoyo a Alessandro Salem, director ejecutivo de Mediaset España, lanzó un dardo a los colaboradores que han trabajado este verano en la tele. «Si yo fuera ellos estaría temiendo que me metieran en la cárcel por aburrir a la gente».

Y acabó su discurso con un contundente mensaje. «Vengo con una única misión: hacer lo que se hacer, entretener. Vengo sin ningún ánimo revanchista. Vengo a trabajar y pido a la gente que no trabaja que al menos no enrede».