la suerte contraria
Normas no escritas
El PSOE se pasa las normas escritas por el forro. Empezando por la norma suprema, que es la Constitución
Carvajal, Nacho, Valverde
El lado correcto de la historia
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Iniciar sesiónMi norma no escrita favorita es quedarse de pie hasta que te ofrezcan asiento. La segunda, utilizar al fiscal general del Estado para tus fines. La tercera es taparse la boca para estornudar. La cuarta, que el que tira el balón fuera del campo ... ha de ir a por él, ya saben, la célebre ley de la botella: el que la tira va a por ella. También a favor de «carta en la mesa, pesa», o «presa», según las versiones. Incluso en acepciones más circenses: «Carta en la mesa se levanta con el codo». Otra norma no escrita que me interesa especialmente es la de respetar a las hermanas, novias e incluso exnovias de los colegas. No digamos ya a las madres. Y de las hijas ni hablamos.
Me parece interesante también la norma no escrita que se ha inventado el PSOE que obliga a un juez a prevaricar posponiendo las citaciones a declarar de aquellos investigados cuya imputación le venga mal al Partido Socialista. Ojo, no se trata de miembros del partido, no se trata de diputados, senadores u otros cargos que puedan estar aforados y ni siquiera se trata de miembros del Consejo de Ministros, sino de todos los anteriores y, además, de sus familiares, no se sabe hasta qué grado de consanguineidad. Y de sus amigos, entiendo. El juez, dicen, debe modificar los tiempos procesales que le marca la ley para acompasarse a los objetivos electorales que le marque Bolaños. Nunca antes había escuchado a un partido europeo pedir públicamente la prevaricación de un funcionario público. Excepto la de Conde Pumpido, que debe de ser otra norma no escrita.
Otras normas no escritas interesantes son masticar con la boca cerrada, ponerse en el lado derecho de la escalera mecánica y dejar salir antes de entrar en un vagón. Algo más sofisticadas, pero no menos populares son, por ejemplo, las costumbres de convocar debates sobre el estado de la nación de vez en cuando, de no subvertir el orden constitucional y, extremando la pulcritud consuetudinaria, la de no tocar las narices ni faltar al respeto al Jefe del Estado para cuadrar tus relatitos de 'spin-doctor'. También son interesantes las normas no escritas que dicen que hay que invitar a una ronda si te invitan a ti, llevar vino si te invitan a cenar a casa ajena y no registrar a tu nombre algo que un tercero ha querido donar de modo filantrópico, bien sea un 'software' a una fundación o una propina a los camareros del bar de abajo. Más normas no escritas son no escupir, no eructar y no tomarse cinco días libres si tienes más de doce años o has leído más de doce libros.
El PSOE se pasa las normas escritas por el forro. Empezando por la norma suprema, que es la Constitución. Según parece, ellos se rigen por otras normas, las no escritas, como en las tribus; observan las mareas, preguntan a los astros y siguen los designios del oráculo, al que llaman comité de expertos y que al final resultó ser un tal Koldo en La Chalana. Una norma no escrita interesante es dar la enhorabuena al ganador de las elecciones. Otra es irte cuando estás haciendo el ridículo.
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