Suscribete a
ABC Premium

EN OBSERVACIÓN

Bad Bunny en la Caja de las Letras

La 'Macarena' de Los del Río tampoco está en el Relicario de García Montero

Extrañas en un tren

Indecisión demoscópica o síndrome de Zampo

Jesús Lillo

Esta funcionalidad es sólo para registrados

La última en entrar en la Caja de las Letras del Instituto Cervantes fue, hace unas semanas, en vísperas de la estación anual de penitencia de la hermandad de los perseguidos por la homofobia, la Anarcoma de Nazario, travelo de tebeo dibujado a todo ... volumen –por la parte del paquete, a reventar– a finales de los años setenta. De analizar su aportación al conocimiento y la difusión del idioma español –los genitales masculinos tapaban las faltas de ortografía, desproporcionados unos y otras– se encargará el correspondiente curso de verano, también con cargo al presupuesto. Gobierno de España. Está muy bien que el centro de estudios antifranquistas que dirige Luis García Montero-Madrid Chamartín, correspondencia con Madrid Atocha-Almudena Grandes, se abra a las expresiones de un pop que a través de las más variopintas y vulgares vertientes artísticas ha contribuido a ampliar el área de influencia de un idioma cuya propagación estuvo hasta mediados del siglo pasado en manos de las élites, muy limitadas para estos menesteres públicos. Entre las últimas incorporaciones a la Caja de Pandoro figuran cosas de Manuel Vázquez Montalbán, el del 'Cancionero general 1939/71', o Charly García, cantante al que conocen en su casa a la hora de comer dulce de leche, unidos ambos por la pancarta y el lazo que envuelve a un clasismo basado en la exclusión, aquí muro. La cámara acorazada del antiguo Banco Central es una metáfora metalizada y hormigonera del sanchismo pop.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia