en clave de tron
Las bestias salvajes de Putin
Los mercenarios de Wagner torturan, violan o matan a martillazos en nombre del psicópata que preside Rusia y les paga
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónNo tenemos derecho a acostumbrarnos a la guerra o a olvidar a los millones de niños víctimas y a las refugiadas ucranianas, mientras Putin prosigue matando sin compasión a sus propios compatriotas y a los ucranianos.
Pensé escribir esta columna sobre la número dos de ... Irene Montero (alias Pam) y su feminismo de postureo. Pero puesta en una balanza esta sarta de mediocres frente al horror de la guerra medieval en Europa... no hay duda. Tan solo un apunte: esta mujer no engaña. Ni ella ni su líder supremo. Por eso, la responsabilidad es de quien la nombró y la mantiene. Y este no es otro que el presidente del Gobierno.
Mientras aquí nos sacamos los ojos en una campaña electoral interminable e insufrible, en el este de nuestra Unión Europea un animal salvaje envía a sus mercenarios a matar a sangre y fuego.
Vladímir Putin, un psicópata que pasará a la Historia moderna como uno de los dictadores con menos escrúpulos, igual recluta presos o pobres para enviarlos al matadero, que ejerce como jefe de los monstruos mercenarios del grupo Wagner que torturan, violan o matan a martillazos en nombre del psicópata que preside Rusia.
Y le seguimos comprando petróleo y gas. Y los ultras de Europa y del mundo (desde Bolsonaro a Trump hasta Berlusconni o parte de nuestro Consejo de Ministros) le apoyan o le disculpan a escondidas.
No hay derecho. En este occidente nuestro asistimos impasibles a cómo un grupo de bestias arrasa lo que pilla a su paso. Mujeres, niños, enemigos o desertores. Y lo suben a la red. Y Putin les paga y les arenga ante nuestra desidia y nuestro desinterés.
El grupo Wagner asesina en Ucrania como lo hace a diario en África y como masacraron en Siria. Lo mismo se despliegan para proteger a Maduro que provocan un golpe de Estado en el Sahel sin limite en sus salvajadas, sin respeto a derecho alguno y sin reglas.
Insisto: La guerra en Ucrania nos ha puesto frente al espejo nuestro europeísmo y nuestras dependencias. Frente a nuestro cinismo.
Mientras tanto, nos entretenemos con las estupideces de 'alias Pam' y las provocaciones de una campaña eterna, a la vez que Europa se desangra desde el este por culpa de un lunático rodeado de bestias.
PD: En 'Mediodía Cope', Carlos Mateos, un español residente en San Petersburgo y casado con una rusa, contó que días atrás le llegó una citación para acudir a la oficina de reclutamiento. Finalmente se salvó por su nacionalidad.
Putin no sabe de dónde rascar soldados para mandar a morir. Le dan igual hasta sus propios muertos.
Límite de sesiones alcanzadas
- El acceso al contenido Premium está abierto por cortesía del establecimiento donde te encuentras, pero ahora mismo hay demasiados usuarios conectados a la vez. Por favor, inténtalo pasados unos minutos.
Has superado el límite de sesiones
- Sólo puedes tener tres sesiones iniciadas a la vez. Hemos cerrado la sesión más antigua para que sigas navegando sin límites en el resto.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete