Suscribete a
ABC Premium

La suerte contraria

La noche que me eligió el Real Madrid

Si mañana ganamos otra vez la Copa de Europa creo que habría que plantearse abandonar el fútbol

Equipo del Real Madrid
José F. Peláez

Esta funcionalidad es sólo para registrados

EL Madrid no se elige: el Madrid te elige a ti. Y lo hace cuando estás preparado. A mi me eligió una noche de mayo normal y corriente, una de esas en las que hace bueno, huele a flores y el Madrid gana una Copa ... de Europa. Nada extraordinario. Recuerdo que me puse enfermo. Fue en la undécima, creo, o quizá la duodécima, ya ni lo sé, empiezo a mezclar copas de Europa. Lo que sí que recuerdo es que fue como un exorcismo. Por mi boca había salido tal cúmulo de blasfemias, barbaridades y exabruptos antimadridistas que mi garganta dijo basta. Me entró una infección y fiebre muy alta. Pasé tres días en trance en la más estricta soledad. Eso, para un autónomo, son palabras mayores, pero exactamente así es como sucedieron las cosas. Algo debió de ocurrirme en medio del delirio, alguna circunstancia sobrenatural o simplemente la visita de algún espíritu catártico, quizás el de Juanito. Pero cuando me desperté asumí la verdad con naturalidad, simplemente entendí de golpe que el Madrid me había llamado. Lo acepté sin dramas, sin traumas y con esa sensación de estar haciendo lo correcto que en tan pocas ocasiones me ha acompañado.

Artículo solo para suscriptores

Esta funcionalidad es sólo para suscriptores

Suscribete
Comparte esta noticia por correo electrónico
Reporta un error en esta noticia