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Una raya en el agua

La libertad de Camila

Hablando con propiedad, Camila Acosta aún no es libre, por desgracia. Simplemente ha dejado de estar secuestrada

Ignacio Camacho

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Camila Acosta ha estado cuatro días detenida, secuestrada más bien, pero presa lleva mucho más tiempo, casi toda su vida. Como su familia, como todos los cubanos que continúan residiendo en la isla. Estar preso significa carecer de libertad y en ese sentido Cuba entera ... es una gigantesca cárcel, una prisión donde los cautivos pueden -aunque no siempre- caminar por la calle porque no existe manera de escaparse. Sólo que a diferencia de los presos de los países democráticos, están privados de sus derechos fundamentales. Los que disfruta esa sedicente izquierda que desde fuera apoya al castrismo sin solidarizarse con un pueblo sometido a toda clase de penalidades. Esos progresistas de salón que de vez en cuando reciben en La Habana trato de invitados oficiales mientras desprecian a la oposición que se juega el tipo por intentar mostrarles la realidad sin maquillaje de ese paraíso en el que ya no quiere vivir nadie.

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