Los técnicos prevén «una caída masiva de árboles este otoño»

Los sindicatos manifiestan su «preocupación» por que el otoño se convierta en una «lluvia de ramas». «Cuando llueve intensamente y durante varias horas la copa de los ejemplares mal podados y muy cargados de masa vegetal se empapa y, al pesar más, existe un riesgo mayor de que las ramas con fisuras se desgajen y caigan a la vía pública», apuntan desde UGT. Un extremo desmentido por el Ayuntamiento que aseguró ayer que «la lluvia por si sola no es un factor de riesgo para el arbolado de Madrid».

«Tanto en otoño como en primavera llueve mucho y eso no se traduce en un problema para los árboles», aseguran. «Otra cosa son los fenómenos meteorológicos adversos en los que va asociada a tormentas y fuertes rachas de viento», explican fuentes del Área de Medio Ambiente. Fenómenos y «causas múltiples» como la tormenta a la que los técnicos municipales atribuyeron el desprendimiento de la rama de 400 kilos que mató al militar en El Retiro. Según los jardineros consultados «el agua en exceso afecta también a las raíces y a la tierra que las rodea, que son la base de cada ejemplar».

Para el representante de Jardinería de UGT los trabajos realizados por el Ayuntamiento «no son suficientes». Los técnicos consultados están «muy preocupados por la pasividad municipal». Sin embargo, el Área de Medio Ambiente niega que vaya a existir un «riesgo mayor» y recuerda que se ha reforzado la inspección de los árboles. Sólo entre el 8 de agosto y el 8 de septiembre se han realizado 170.246 inspecciones extraordinarias sobre los ejemplares de la capital, apuntan las citadas fuentes.

A ello se suma una revisión específica del inventario del arbolado y tareas especiales de estudio de las especies que adornan el eje Prado-Recoletos y la Colonia del Manzanares. «Estos estudios, además del que está realizando la comisión de expertos en El Retiro –que prefirieron no hacer declaraciones hasta que su dictamen sea público–, se extenderán a otras zonas», aseguran desde el Gobierno local. Sobre la poda –que los sindicatos consideran que ha sido «escasa» y que está «mal hecha»– el consistorio afirma que se seguirán realizando de forma puntual y que comenzará de manera intensiva con la llegada del frío –entre octubre y marzo– coincidiendo con la parada vegetativa de los árboles. «No obstante los planes se revisarán para adaptarlos a nuevos criterios que garanticen la seguridad de los ciudadanos», añaden.

A pesar del «alarmismo» de los sindicatos, desde el área que coordina el delegado de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, Diego Sanjuanbenito, niegan que haya un incremento «significativo» de los expedientes por responsabilidad patrimonial por accidentes provocados por el arbolado madrileño. Un asunto sobre el que el delegado volverá a responder hoy ante la oposición en la comisión ordinaria del ramo .