El Foro Mediterráneo escenifica un nuevo desencuentro entre Generalitat y Gobierno

El Foro del Mediterráneo es un tgrupo de rabajo diseñado para analizar la cooperación entre una decena de Estados de las dos orillas del Mediterráneo, un espacio de diálogo que presidirá el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y en el que el presidente catalán, Artur Mas, deseaba intervenir para dar la bienvenida a los participantes. Según la Generalitat, Mas debería poder pronunciar unas palabras, "un discurso protocolario", ya que la cumbre se celebra en el Palacio de Pedralbes de Barcelona.

El Gobierno, sin embargo, recordó ayer que, además de tratarse de una reunión de Estados, el programa del Foro se cerró hace tiempo y no fue hasta hace unos pocos días que el ministro de Exteriores, José Manuel García Margallo, recibió una carta del consejero de Presidencia de la Generalitat, Francesc Homs, pidiendo que Mas fuese invitado a la reunión.

Según Margallo, una intervención del presidente catalán sería algo "contrario a la práctica". "No se puede intentar rebajar la tensión saltándose un poco las reglas del juego", añadió el ministro de Exteriores quien, sin embargo, ha invitado a Mas a sumarse al Foro en calidad de invitado y acompañado a Mariano Rajoy en la inauguración.

Una solución que, lejos de contentar a la Generalitat, fue recibida ayer por el conseller de Presidencia y portavoz del Ejecutivo catalán, Francesc Homs, como una decisión "sorprendente y errónea". "Es evidente que no está en la línea del principio de buena colaboración institucional", aseguró Homs. "Creemos que es un error impedir que uno se dirija a los asistentes en su propia casa y nos duele", subrayó, poniendo especial énfasis en el hecho de que el foro se celebre en un recinto propiedad de la Generalitat y en el que participa, entre otras organizaciones, el Instituto Europeo del Mediterráneo (IEMed), presidido por Mas.

Es más: el conseller avanzó que los técnicos de Exteriores de la Generalitat participan en el diseño del Foro desde el pasado julio y que inicialmente se habló de que Mas y el alcalde de Barcelona, Xavier Trias, pudieran dar la bienvenida, "en la línea de lo que se ha hecho" en otras ocasiones.

Así, ante lo que el gobierno catalán considera "un error", Artur Mas acudirá este miércoles al Palacio de Pedralbes para recibir a los asistentes y se marchará para acudir al pleno del Parlament, ausentándose así de la reunión y sin escuchar la intervención del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. "Mas solo recibirá por educación a los participantes en el Foro Mediterráneo y luego se irá al pleno del Parlament", confirmó Homs.

No especificó el conseller si el presidente catalán asistiría o no a la intervención de Rajoy, pero teniendo en cuenta que la inauguración tendrá lugar poco antes de las 11.30 horas y que Mas debe someterse a la sesión de control de la cámara catalana a las 10.30 horas, su ausencia se da por hecha.

Tampoco parece que el presidente del Gobierno vaya a aprovechar su visita a Barcelona para mantener un encuentro con Artur Mas y abordar la tensión soberanista. Así lo confirmó el propio Rajoy hace unos días cuando, durante un viaje oficial en Panamá, subrayó que el Foro se ceñiría a asuntos empresariales y situaciones como la inmigración. "De eso es de lo que fundamentalmente vamos a hablar. Yo de lo demás, la verdad, es que no me he ocupado. No tiene sentido, vamos a dedicarnos a cosas que son muy importantes", señaló Rajoy.