Andrei Petrov, de churrero a magnate

El principal implicado en la operación contra la mafia rusa que se lleva a cabo en Lloret de Mar es el empresario Andrei Petrov, que ha sido arrestado por la guardia civil junto a su padre, Boris, su secretaria, Jessica Holguin, y la arquitecta Pilar Gimeno. Están acusados, de momento, de un delito de blanqueo de dinero. La Guardia Civil también está registrando el despacho de la arquitecta y la inmobiliaria Gimeno, situada en el paseo Marítimo.

La fortuna de Petrov, que ahora está manchada de sospecha de blanqueo de dinero, se ha forjado en los últimos diez años, desde que el empresario ruso orilló en LLoret. Fue en 2001 cuando recaló, junto con su mujer, sus padres y hermanois en el municipio de la Costa Brava. En un principio se dedicó a negocios modestos, como el transporte de de turistas con furgoneta o regentando una churrería. Con el tiempo fue expandiendo sus intereses empresariales en sectores como la hostelería, el inmobliario o la explotación de gasolineras, entre otros.

Actualmente, su empresa Diagnostic Developing Consulting, mantiene negocios en común con el Consistorio, de ahí que los agentes de la Guardia Civil hayan registrao la sede del Ayuntamiento de Lloret en busca de documentación de persona físicas y jurídicas relacionadas con los detenidos. La empresa de Petrov patrocinaba también el equipo de fútbol de la población catalana.

En este sentido, según confirmaron a ABC fuentes municipales, la empresa de Petrov es copropietaria, junta al Ayuntamiento, del centro comercial ubicado en los terrenos que en su día ocupaba la antigua plaza de toros que había en la población. De hecho, el párking del centro comercial es propiedad del Ayuntamiento.

El alcalde de Llore de Mar, Romà Codina, asegura que el Ayuntamiento "está limpio" y que no hay ningún funcionario ni político implicados en la investigación que la Guardia Civil lleva a cabo desde este viernes por la mañana en el consistorio.

En una comunicación a los medios de comunicación, el alcalde ha afirmado que está "muy tranquilo" ya que la Guardia Civil y la Fiscalía solamente han pedido información sobre personas físicas y jurídicas de la localidad que no tienen nada que ver con el Ayuntamiento.