Los apartamentos turísticos recurren el nuevo Plan de Usos de Ciutat Vella

Sus alegaciones al Plan, que presentarán antes de que se cumpla el plazo para hacerlo (18 de junio) se concentra en dos temas: la reubicación forzosa y el agravio comparativo. La nueva norma exige a los apartamentos turísticos de Ciutat Vella que se agrupen en edificios destinados a ello en un término de seis años -empresarios con varios pisos, dueños de un único piso en alquiler, todos-. En esta misma zona, desde hace ocho años no se han otorgado licencias nuevas para apartamentos turísticos, en fincas destinadas en exclusiva a ello o no. El nuevo plan, a su vez, revoca la prohibición de otorgar licencias para hoteles en este área, no así la de los apartamentos turísticos (agravio comparativo).

La escasez de licencias, sumada a la proliferación de nuevas páginas de internet que permiten la promoción de pisos para alquilar ha provocado un aumento exhorbitante de pisos ilegales en el Gótico. «Es a ellos a quienes tendríamos que atacar, nosotros pagamos las mismas tasas que los hoteles», exige Riba. «No por ser una empresa pequeña el dueño de un piso turístico legal tendría que ser menos que los demás», agrega.

Para Apartur, la solución pasa por convivir mejor y hacer frente juntos ante la que para ellos es la problemática real que afecta al turismo barcelonés: los pisos ilegales. «Internet nos está cambiando a todos, por eso no está bien que unos pocos nos digan cómo tenemos que actuar. Los monopolios y los oligopolios no son buenos para la sociedad», sentencia Riba.

Apartur aboga por la libertad de las personas de poder alquilar su piso, por lo que piden al Ayuntamiento licencias nuevas y el reajuste del nuevo Plan de Uso. «No entendemos la razón de esta obligatoriedad, ha sido una sorpresa, ya en el 2010 se intentó agregar al plan de usos», comenta Riba. En su momento, apelaron con éxito. «No sabemos por qué lo han vuelto a poner», anota