La Unión Europea y el Reino Unido alcanzan un acuerdo para el nuevo Protocolo de Irlanda del Norte

Sunak y Von der Leyen se encontraron en Berkshire, al oeste de Londres, tras anunciar el domingo en un comunicado que el motivo de la reunión era «seguir trabajando» para dar «soluciones prácticas» al protocolo, que forma parte del acuerdo del Brexit pero que desde el principio ha generado problemas para su puesta en práctica. Además, provocó que el Ejecutivo de Irlanda del Norte esté en este momento sin cabeza, a la espera de que los nacionalistas del DUP acepten formar Gobierno con el Sinn Féin, ganadores de las últimas elecciones, pero a lo que se niegan como protesta por el protocolo, que denuncian que pone a Irlanda del Norte en desventaja con respecto a su relación con el resto del Reino Unido.

La llegada de Sunak a Downing Street supuso que las negociaciones que parecían estancadas hayan llegado a buen puerto, al menos de momento, aunque queda esperar el veredicto de los unionistas y también de los parlamentarios conservadores más euroescépticos. El DUP ha comentado que se tomará su tiempo para estudiar lo acordado.

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Ivannia Salazar

El objetivo es «lograr soluciones compartidas y prácticas al abanico de complejos desafíos», ha especificado un comunicado conjunto del Reino Unido y la Unión Europea

Sunak dijo sentirse «complacido de informar que ahora hemos logrado un avance decisivo» en el Protocolo de Irlanda del Norte y que ambas partes han «cambiado el protocolo original» por el «Windsor Framework», o marco de Windsor. «Hemos encontrado formas de poner fin a la incertidumbre y los desafíos para la gente de Irlanda del Norte», dijo, y detalló las soluciones para los principales problemas que habían para el funcionamiento del protocolo. El Reino Unido y la UE han dado «tres grandes pasos adelante», dijo el ‘premier.’

El primero asegurará el «flujo del comercio dentro del Reino Unido»; el segundo significa que las dos partes han «protegido el lugar de Irlanda del Norte en la Unión» y «hemos modificado el texto legal del protocolo» para que las decisiones sobre el IVA se apliquen a todo el Reino Unido; y el tercero «salvaguardará la soberanía para la gente de Irlanda del Norte» ya que su asamblea podrá evitar que las nuevas leyes de la UE se apliquen en Irlanda del Norte gracias al ‘Stormont brake’ o ‘freno de Stormont’.

Von der Leyen, que explicó que este es un mecanismo de emergencia, calificó como «extraordinario» el resultado de las negociaciones, que, aseguró, protegen el acuerdo de paz «ganado con tanto esfuerzo» hace casi 25 años.

«El marco de Windsor permitirá comenzar un nuevo capítulo», aseguró la presidenta europea, y garantizará, entre otros beneficios, «que todos los alimentos disponibles en Gran Bretaña estén disponibles en Irlanda del Norte, y que todos los medicamentos disponibles en Gran Bretaña estén disponibles en Irlanda del Norte al mismo tiempo», haciendo así referencia a la escasez de productos en la pequeña provincia británica por causa del protocolo. El pacto preservará el «delicado equilibrio» del acuerdo de Viernes Santo, coincidió por su parte el ‘premier’, y protegerá las «aspiraciones y la identidad» de toda la población norirlandesa. Sunak confirmó que «habrá una votación» en el Parlamento «en el momento adecuado» y que «esa votación será respetada».

Tras la rueda de prensa, Von der Leyen mantuvo un encuentro con el Rey Carlos III que es un gesto buscado por el Gobierno británico para dejar claro ante las suspicacias de los dirigentes del DUP que el acuerdo concierne a todo el Reino Unido y no es, como dicen sus detractores, un mecanismo para separar a la isla de Gran Bretaña del territorio británico en Irlanda.

Una vez anunciado el acuerdo entre el primer ministro británico y la presidenta de la Comisión, en Bruselas se reunió el Coreper, el órgano en el que deliberan los embajadores de los 27 países miembros que son lo que tienen que ratificar el acuerdo al que ha llegado la Comisión. Las perspectivas de que hubiera ‘fumata blanca’ estaban tan claras que la presidencia sueca había convocado ya esta reunión de la tarde poco después de que Von der Leyen saliera para Londres. Una vez que los países han sido informados de los detalles de lo acordado empieza el proceso por el que en cada capital han de dar su luz verde. Para centrar las cosas, después del Coreper se reunió el grupo de trabajo sobre el Brexit que es un órgano más restringido, en el que es sobre todo Irlanda, el país más directamente concernido por este asunto, el que lleva la voz cantante. Si ningún país está en contra de este acuerdo, lo que es poco probable, será aprobado por un consejo de ministros formal y después deberá ser ratificado en cada capital para que sea efectivo.

La solución alcanzada permitirá que se mantenga la libre circulación entre la República de Irlanda e Irlanda del Norte, de modo que personas y mercancías podrán desplazarse libremente entre las dos partes de la isla. A pesar de la tozudez de los nacionalistas unionistas y de los más extremistas partidarios del Brexit, Irlanda del Norte se convertirá en un territorio con la particularidad de pertenecer al mismo tiempo al Reino Unido y al mercado único europeo. Una enorme ventaja que solo los más fanáticos son incapaces de distinguir.