La UE asiste impotente a la crisis en Oriente Próximo sin recursos para intervenir

Ningún país europeo ha criticado que Estados Unidos se sume a los ataques israelíes contra Irán a pesar de que esta postura no hace sino recalcar el carácter ilusorio de todas sus iniciativas diplomáticas en la región.

Ayer se había preparado precisamente el primer intento de revisar el tratado de Asociación con Israel, que incluye el compromiso por parte del Estado judío de respetar los derechos humanos. A la luz de lo que está sucediendo en Gaza, incluso la Comisión Europea había asumido la necesidad de redactar un informe en el que por primera vez se recogían algunas críticas a Israel.

Sin embargo, ayer en Luxemburgo, la Alta Representante, Kaja Kallas, describió el debate entre los ministros como «muy amplio e intenso» y terminó con la conclusión de que «se necesita mejorar la situación sobre el terreno« para que la ayuda humanitaria pueda entrar en la Franja de Gaza y llegar a la población. Es más, »nuestro objetivo no es castigar a Israel, sino lograr mejoras concretas para la población y la vida de los habitantes de Gaza« y »si la situación no mejora, podemos debatir nuevas medidas y volver a hablar de ello en julio«.

En cuanto al caso de Irán y la cuestión de los ataques a los centros donde se sospecha que estaba construyendo armas con capacidad nuclear, la política europea consiste en pedir a los actores, es decir Estados Unidos e Israel y el mismo Irán, que «resuelvan sus diferencias a través de la negociación». La UE logró su primer y prácticamente único éxito diplomático con el tratado por el que Irán se comprometía a renunciar al arma atómica a cambio de que se suprimieran las sanciones, aunque Estados Unidos lo abandonó en el primer mandato de Trump precisamente ante la evidencia de que Teherán no lo estaba respetando. Ahora ya se limitan a intentar persuadir a Estados Unidos e Irán para que negocien. «Mantenemos los canales abiertos porque el consenso está en la necesidad de seguir negociando para lograr que Irán renuncie a las armas nucleares».