Trump vuelve a ser imputado por la elección de 2020: «Quiero encontrar 11.780 votos»
El expresidente recibe su cuarta imputación en Georgia, donde trató de revertir su derrota por un puñado de votos
Trump recibe en Georgia su cuarta imputación, esta vez junto a 18 acusados
Georgia fue en 2020 un terremoto político. Era un estado consolidado para los republicanos en las elecciones presidenciales desde mediados de la década de 1960: sólo Jimmy Carter, que es de allí, y Bill Clinton en 1992, consiguieron victoria para los demócratas. Ni siquiera ... el fenómeno de Barack Obama tiñó el estado de azul.
Pero hace cuatro años, Georgia fue una de las razones por las que Donald Trump no consiguió su reelección. Ganó Joe Biden por una diferencia minima, 11.779 votos, y Trump no aceptó el resultado. Al igual que hizo con el resto de estados donde la elección se resolvió por algunas decenas de miles de votos –Arizona, Pensilvania, Michigan, Wisconsin, Nevada– clamó que había sufrido «robo electoral» y montó una campaña para revertir el resultado. Fue un esfuerzo desordenado, infundado –ni los tribunales ni su propio Departamento de Justicia encontraron evidencias de fraude masivo–, excéntrico, temerario –acabó con el asalto trágico y bochornoso al Capitolio del 6 de enero de 2021– y, según la fiscalía, criminal.
Varias causas abiertas
Esa campaña supuso la imputación de Trump a finales del mes pasado en Washington, dentro de la investigación por parte del fiscal especial Jack Smith. Era la tercera vez que un juez le leía cargos criminales al multimillonario neoyorquino, que ha convertido lo históricamente extraordinario en rutinario. En marzo, Trump se convirtió en Nueva York en el primer expresidente de EE.UU. en ser acusado de cometer crímenes, en este caso relacionados con los pagos para silenciar una relación extramatrimonial con una actriz porno poco antes de las elecciones de 2016. A principios de junio, en Miami, Trump era imputado por la retención de cientos de documentos clasificados que se llevó de la Casa Blanca, en investigación liderada también por Smith.
Ahora, una nueva causa trata la campaña para dar la vuelta a los resultados, pero centrada en lo ocurrido en Georgia, dentro de su jurisdicción estatal (los dos casos que ha investigado el fiscal especial Smith pertenecen a la jurisdicción federal).
La investigación ha sido liderada por Fani Willis, fiscal de distrito del condado de Fulton, que incluye a buena parte de la mayor ciudad de Georgia, Atlanta, y su zona suburbana.
18 colaboradores, también acusados
Willis ha tomado un rumbo muy diferente al de Smith. Este último nombró a seis co-conspiradores en la trama de Trump, pero no les imputó, quizá en un intento de simplificar el proceso de llevar al expresidente ante la justicia. Willis, en cambio, basa su imputación en que Trump y sus aliados participaron en un crimen organizado y se apoya en una legislación específica de Georgia, conocida como RICO (Ley de Organización Corruptas, de Influencia y de Asociación Delictiva, en sus siglas en inglés).
Juicios pendientes
de Trump
Eventos de
la campaña republicana
2024
15 de enero
Caucus de Iowa
15 de enero
Juicio por difamación a
la periodista E. Jean Carroll
Primarias de
New Hampshire
Juicio por intentar alterar
el resultado electoral en
Georgia en 2020
(fecha por determinar)
6 de febrero
Primarias de Nevada
5 de marzo
Súper Martes
Votan 14 estados
25 de marzo
Juicio por pago a la actriz
porno Stormy Daniels
20 de mayo
Juicio por los papeles
clasificados de Mar-a-Lago
15 de julio
Convención republicana
5 de noviembre
Elecciones a la presidencia
Fuente: Elaboración propia / ABC
Juicios
pendientes
de Trump
Eventos de
la campaña
republicana
2024
15 de enero
Caucus de Iowa
15 de enero
Juicio por
difamación a
la periodista
E. Jean Carroll
Primarias de
New Hampshire
Juicio por
intentar alterar
el resultado
electoral en
Georgia en
2020 (fecha
por determinar)
6 de febrero
Primarias de
Nevada
5 de marzo
Súper Martes
Votan 14 estados
25 de marzo
Juicio por pago
a la actriz porno
Stormy Daniels
20 de mayo
Juicio por
los papeles
clasificados de
Mar-a-Lago
15 de julio
Convención
republicana
5 de noviembre
Elecciones a
la presidencia
Fuente: Elaboración propia / ABC
Esta norma permite incluir en un delito a participantes en actividades que, aunque no sean criminales en sí mismas, se llevan a cabo para la ejecución de un objetivo delictivo.
Por eso, Willis acusa no sólo a Trump, sino también a otras 18 personas, de participar en esta trama. Entre ellos, hay figuras de su círculo más íntimo, como el propio Giuliani, o Mark Meadows, su último jefe de Gabinete en la Casa Blanca. También aparecen varios abogados que Trump reclutó para tratar de revertir los resultados. Cuando buena parte de su Administración –empezando por el que fue su fiscal general, William Barr– y de su equipo le dijeron que la vía judicial estaba exhausta, que había perdido, el entonces presidente confío en abogados que ofrecían teorías y planes –la gran mayoría, disparatados– para mantener la presidencia. Entre estos, aparecen nombres como John Eastman, Kenneth Chesebro, Sidney Powell o Jenna Ellis. También está imputado Jeffrey Clark, uno de los pocos altos cargos del Departamento de Justicia que apoyó sus planes para clamar victoria electoral y a quien Trump quiso colocar de fiscal general interino para facilitar sus planes (no lo hizo ante la amenaza de una dimisión en bloque de la cúpula del Departamento de Justicia).
Ellos y el resto de acusados comparten la acusación de la violación de la ley RICO, pero Trump y Giuliani son quienes más cargos acumulan: trece cada uno de ellos, entre los que destacan, además del de RICO, la solicitud de violación del juramento al respeto a la legalidad a un cargo público, falsedad testimonial y documental o conspiración para registrar documentos falsos.
«Una empresa de crimen organizado»
«Georgia, como el resto de estados, tiene leyes que permiten que aquellos que creen que los resultados de una elección son incorrectos denuncien esos resultados ante los tribunales», dijo Willis el lunes por la noches, en una rueda de prensa tras conocerse los cargos. «La imputación establece que en lugar de seguir el proceso legal en Georgia para revisar elecciones, los acusados se implicaron en una empresa de crimen organizado para dar la vuelta a las presidenciales en el estado», añadió, en un lenguaje que recuerda al que se utiliza en casos en los que está implicada la mafia.
Willis arrancó su investigación hace dos años y medios, poco después de que se filtrara a la prensa un audio muy comprometedor para Trump. Era una llamada a principios de enero de 2021, poco antes de que el Congreso certificara la victoria de Biden, en la que exigía al secretario de Estado de Georgia, el republicano Brad Raffensperger, que «encontrara» los votos que le hacían falta para ganar aquel estado.
«Lo único que quiero es esto, sólo quiero encontrar 11.780 votos», presionaba Trump a Raffensperger y a su equipo, que le insistían en que habían investigado todas las alegaciones «cientos de miles de votos fraudulentos» sin encontrar nada sustantiva. «Mira, no sé, Brad. Tengo que encontrar 12.000 votos«, insistía una y otra vez, con amenazas a Raffensperger con que no encontrar fraude sería »peligroso« para él.
La imputación recoge esas y otras presiones a cargos públicos, dentro y fuera de Georgia, para revertir el resultado de las urnas. Como en la investigación de Smith, se acusa a Trump de presionar con falsedades sobre el fraude a sabiendas de que lo eran. Y se incluyen otras actividades criminales, todas dentro de esa empresa criminal compartida, como la presentación de electores –los delegados que elige cada estado para determinar quién es presidente– falsos, el acoso a empleados electorales o la penetración en los sistemas de votación en un condado de Georgia.
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