Tres hogueras mayores
EL ANÁLISIS TÁCTICO DEL GENERAL (R) PITARCH (30/08/2022)
Las tropas rusas ahora no tienen prisa, si bien continúan presionando y fijando a las tropas ucranianas
Pedro Pitarch
Las principales hogueras o acciones de combate en el teatro se localizan hoy en tres zonas. Una es el Donbass que, desde hace cinco meses, constituye el centro de gravedad de la ofensiva rusa hacia el oeste ucraniano. Progresión costosa y lenta como consecuencia ... del eficaz esfuerzo defensivo ucraniano, que resultó sobresaliente en Mariúpol y Severodonetsk-Lysychannsk. Pero las tropas rusas, en respuesta coherente con la «estrategia de invierno» del Kremlin, ahora no tienen prisa, si bien continúan presionando y fijando a las tropas ucranianas, evitando así que pudieran ser empleadas en otros frentes. Si, además, lograran hacerse con Bajmut y Kramatorsk, se podría dar por hecha la ocupación rusa del oblast de Donetsk y, por tanto, de todo el Donbass.
Otra «hoguera» está en la central nuclear de Zaporiyia, ocupada por las tropas rusas desde comienzos de la invasión y que viene siendo objeto de bombardeos, de cuya autoría ambos bandos se acusan recíprocamente. Un equipo de la OIEA, auspiciado por Naciones Unidas, ha comenzado a inspeccionar el estado de esa central, en previsión de accidentes que pudieran derivar en una catástrofe planetaria. Un riesgo que se podría obviar o bien con un acuerdo de neutralización militar de la zona, o bien con el apagado «regulado» de la central (con consecuencias energéticas muy adversas para Ucrania).
La tercera, la más fulgurante, es la de Jersón. Parece que, por fin, se ha desencadenado la «gran» contraofensiva que las autoridades ucranianas venían voceando desde antes de San Fermín. La finalidad de la acción sería recuperar el terreno, al oeste del bajo Dniéper, ocupado por las tropas rusas, expulsándolas o embolsándolas. El objetivo operacional de la contraofensiva sería la ciudad de Jersón. El secundario, las instalaciones de la presa de Kajovka―Nova Kajovka para tratar de cortar el flujo de agua hacia Crimea. Las «nuevas» y heterogéneas bocas de fuego ucranianas llevan un tiempo machacando las obras de fábrica sobre el río, tratando de negar el apoyo logístico ruso a sus tropas. Frente a ello, las unidades rusas llevan semanas reforzándose defensivamente en la zona. Habrá que esperar un poco para evaluar los resultados de tal contraofensiva, aunque no sean de suponer éxitos fabulosos.
El autor es teniente general retirado del Ejército de Tierra. Fue jefe del Eurocuerpo y de la Fuerza Terrestre y director general de Política de Defensa en el Gobierno de Zapatero. Ocupó la jefatura de la División de Estrategia y Cooperación Militar del Estado Mayor de la Defensa, así como de la División de Logística del Mando Supremo de la OTAN.
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