Tortura, asfixia, una mujer misteriosa y tráfico de órganos: lo que se sabe del crimen de la niña de 12 años en París

Cuatro personas han sido detenidas y, por el momento, la policía baraja diferentes hipótesis sobre el motivo del crimen en el que es uno de los barrios más conflictivos de la capital francesa. Entre ellas, el tráfico de órganos. Las autoridades no han ofrecido excesivo detalle pero esto es lo que se sabe por el momento del estremecedor suceso.

Lola no volvió a su casa después del colegio el viernes. Apenas 200 metros separan la escuela Georges Brassens de su vivienda, situada en el 119 de la Rue Manin, donde su padre ejerce como portero. El hombre, al ver que la niña tardaba en regresar, algo nada habitual, comenzó a preocuparse y la madre acudió a la comisaría del distrito a denunciar la desaparición.

Su padre decide revisar las cámaras de seguridad del edificio por si logra encontrar alguna pista sobre el paradero de su hija. Es entonces cuando comprueba que Lola sí había vuelto al edificio, pero no lo hizo sola. En la grabación se ve a una mujer, posiblemente en la veintena, completamente desconocida en el edificio y para la familia, entrar al portar con la niña, pero nunca llegaron a subir a casa. Ahí se pierde el rastro.

Se trata de la misma mujer, según testigos, que sería vista horas más tarde arrastrando un baúl y dos maletas aparentemente muy pesadas en una zona cercana del barrio, y que fue ayudada por un conductor de Uber a mover el baúl. Se trata de una de las detenidas, «una mujer trastornada», indicaron algunos de los presentes.

El hallazgo del baúl que contenía el cuerpo de Lola, y dos maletas más con plásticos ensangrentados y otros materiales que no han trascendido, se produjo alrededor de las 23:20 horas de la noche del viernes en el propio patio del edificio en el que residía la familia Daviet.

El cadáver de Lola, atada, presentaba varios cortes en las muñecas y una profunda herida en la garganta por la que su cabeza estaba casi totalmente separada del cuerpo, aunque la causa de la muerte, según la autopsia, fue la asfixia, por lo que se trabaja con la hipótesis de que se le hicieran heridas post mortem. Asimismo, tenía inscrito en el pecho los números 1 y 0.

La policía detuvo a cuatro personas, dos hombres y dos mujeres de 26 a 43 años de edad, todos naturales de Argelia, procesados por asesinato de una menor «con actos de tortura y barbarie». La grabación de las cámaras de seguridad y los testimonios de los testigos fueron claves para la detención.

Por algunos detalles del cadáver de la pequeña Lola que no han trascendido, y por las actividades de los habituales de los detenidos, la hipótesis que más se maneja es la de que se trate de personas dedicadas al mercado negro del tráfico de órganos, aunque no hay confirmación y se trabaja también en otras vías.

El distrito XIX de París, muy cerca de la banlieue, como se conoce en la capital francesa al extrarradio, ha experimentado en los últimos años un alto crecimiento de delincuencia: aumento de tráfico de drogas, trata de personas, robos e instalación de bandas.