Scholz impone una votación a mano alzada para ratificar su candidatura electoral

Pero fue la directiva del partido la que apostó por su candidatura y esa decisión debe ser todavía ratificada por el SPD, en el congreso extraordinario que se celebrará el 11 de enero. Tradicionalmente, el SPD respalda a sus candidatos en votaciones en las que los delegados depositan su voto secreto en las urnas socialdemócratas. Esta vez, sin embargo, Scholz ha impuesto una votación a mano alzada, síntoma de su desconfianza.

«Tras el nombramiento unánime de la ejecutiva del partido en noviembre, Olaf Scholz será confirmado como candidato a canciller en el congreso extraordinario del partido del 11 de enero en una votación abierta a mano alzada», se ha limitado a informar una portavoz del SPD. En 2021, Scholz fue elegido candidato a canciller en una votación secreta durante un congreso digital del partido, organizado así debido a la pandemia del Covid-19, con el 96,2% de los votos. En la Casa Willy Brandt se argumenta ahora que el candidato a canciller no es un cargo y que, por lo tanto, no es necesario el voto secreto. Añaden que, a un mes y medio de las elecciones al Bundestag, «la dirección del SPD quiere enviar una señal de unidad detrás de Scholz».

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El hecho es que el voto a mano alzada tiene un efecto disciplinario y que, en una votación secreta, los críticos internos y los escépticos podrían proporcionar a Scholz un mal resultado, lo que a su vez complicaría la campaña, que se prevé ya lo suficientemente cuesta arriba. En las últimas encuestas, el SPD no supera el 15% (obtuvo un 25,7% en las anteriores elecciones, que ya fue un resultado históricamente bajo). Actualmente, el 63% de los alemanes opinan que Scholz ha hecho un mal trabajo como canciller federal y solamente el 31% manifiesta la opinión contraria.

La unidad interna a la que se refiere la dirección del SPD es necesaria, además, para la recaudación de donaciones, un proceso en el que la conservadora Unión Cristianodemócrata (CDU) lleva claramente la delantera. Los partidos políticos en Alemania se financian con las cuotas de los miembros, las subvenciones estatales y las donaciones, que si son superiores a 35.000 euros deben ser comunicadas al presidente del Bundestag. La CDU ha obtenido por este último concepto 5,37 millones de euros, casi diez veces los ingresos en donaciones obtenidos por el SPD, que ascendieron a unos exiguos 550.001 euros.

Todos los partidos juntos se dirigen a un número récord de donaciones antes de las elecciones al Bundestag. Junto con las subvenciones a la CSU bávara, por valor de 631.000 euros, los conservadores alcanzaban donaciones por valor de casi exactamente 6 millones de euros a finales de año. Cabe anotar que el Partido Liberal (FDP) obtiene 2,77 millones de euros en donaciones y Los Verdes 957.052 euros.

Con diferencia, la mayor donación individual, de 4,09 millones de euros, ha sido registrada por la Alianza Sahra Wagencknecht (BSW). Una adinerada pareja de simpatizantes ha transferido 990.000 euros a este partido populista de izquierda y prorruso, que gracias a esta donación ha alcanzado los 6,41 millones de euros en esta partida. La derecha populista y también prorrusa de Alternativa para Alemania (AfD), sin embargo, ha registrado una única donación importante de 68.038 euros.

A nadie se le escapa, en la Casa Willy Brandt de Berlín, que el SPD estaría obteniendo donaciones más generosas si su candidato hubiera sido el que contaba con mayor respaldo, tanto dentro del partido como en las encuestas, el actual ministro de Defensa Boris Pistorius. Por el momento, Pistorius permanece alejado de la campaña electoral socialdemócrata, que dará inicio el 13 de enero con un primer mitin en Bielefeld encabezado por el se que espera sea ratificado como candidato del SPD, Olaf Scholz. El programa prevé que Scholz responda a las preguntas de los asistentes en el Lokschuppen y la estrategia de campaña parece dirigida a hacer prevalecer una imagen de él afable y simpática.

Sobre la intervención en la campaña electoral alemana de Elon Musk, que ha pedido en un artículo publicado por 'Welt am Sonntag' el voto para AfD, Scholz ha dicho que «es mejor no responder» y que la prioridad es «seguir siendo 'cool'».