Rusia asegura que las exportaciones de gas del Nord Stream 1 se reanudarán según lo previsto

Las fuentes citadas, que hablaron bajo condición de estricto anonimato debido a la delicadeza del asunto, dijeron a Reuters que se espera que el oleoducto vuelva a funcionar a tiempo, aunque a menos de su capacidad, de unos 160 millones de metros cúbicos por día. Esta nueva reducción de suministro supondría una vuelta de tuerca más sobre la economía alemana, que según ha avanzado el ministro de Economía y Clima, Robert Habeck, cuenta ya con caer en la recesión técnica, pero al menos suena mejor que la información que había publicado anteriormente el periódico estadounidense Wall Street Journal, que citando al Comisionado de Presupuesto Europeo, Johannes Hahn, decía por su parte que la Comisión Europea no esperaba que el gasoducto reiniciase su actividad después del mantenimiento.

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AFP

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Gazprom, grupo energético controlado por el Kremlin, ya redujo las exportaciones de gas a través de esta ruta al 40 % de su capacidad el mes pasado, alegando retrasos en la devolución de una turbina que Siemens Energy estaba reparando en Canadá. El diario ruso Kommersant informó ayer (lunes) que Canadá envió la turbina a Alemania en avión el 17 de julio, y que gracias a este entrega se completaron a tiempo los trabajos de reparación. El cierre total y prolongado del flujo de gas ruso hacia la Unión Europea, que el gobierno alemán todavía teme como una posibilidad real, tendría un efecto severo, aunque desigual, entre los países del bloque.

En el caso de Alemania podría suponer hasta seis puntos del PIB, mientras que en el caso de España rondaría un punto porcentual, según las estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI). Putin está utilizando el gas como un arma de guerra con la que mantiene a raya el tipo de apoyo que los países más afectados por la escasez y carestía del gas prestan a Ucrania. «Durante un corte total prolongado del gas ruso, los países más vulnerables de Europa Central y del Este podrían enfrentarse a una escasez total de gas y sufrir pérdidas del PIB de hasta un 6%», advierte el FMI, en referencia también a países como Hungría, Eslovaquia o República Checa República. Tratando de evitar estas consecuencias, el gobierno alemán se esfuerza por sustituir a Rusia como proveedor de gas por otras fuentes alternativas.

Berlín acaba de anunciar la ubicación de más terminales flotantes de gas natural licuado (GNL), detallando que una de ellas estará en Stade, cerca de Hamburgo, y otra en Lubmin, en la costa del mar Báltico. Estas terminales flotantes estarán disponibles a partir de mayo de 2023. Otros dos barcos pueden entrar en servicio este año y estarán ubicados en Wilhelmshaven, en el Mar del Norte, y Brunsbüttel, en el río Elba, desde 2022-23, según el Ministerio de Economía. Se espera que la ubicación de Stade esté lista a finales de 2023, mientras que la planta en alta mar frente a Lubmin estará disponible a finales del próximo año.

El Ministerio ha informado también que un consorcio privado está instalando una quinta terminal flotante de GNL en Lubmin, que estará lista para finales de 2022. «Tenemos que construir una nueva infraestructura en un período muy breve para poder reemplazar el gas ruso lo antes posible», ha explicado Habeck, «por eso es una muy buena noticia que a los cuatro barcos que pertenecen al Estado se sume ahora un quinto barco regasificador privado. Esto nos permitirá aumentar aún más la cantidad que se puede desembarcar y mejorar la situación del abastecimiento». El ministro, sin embargo, ha evitado comentar los indicios de que está a punto de reiniciarse el suministro a través de Nord Stream 1.