Putinianos, los arietes de la propaganda rusa en la Unión Europea
'El testigo', un filme propagandístico ruso sobre la guerra en Ucrania, se está proyectando por toda Italia
Salvini cuestiona las sanciones a Rusia y causa una tormenta política en Italia: «Perjudican a nuestros negocios y familias»
Escándalo en Italia ante las sospechas de que Putin pudo contribuir a derrocar al Gobierno de Draghi
Salvini posa con una camiseta con la cara de Putin frente al Kremlin en Moscú
En el museo municipal situado en Palacio Trinci, del siglo XV, en el centro de la ciudad de Foligno, en la región de Umbría, centro de Italia, unas 80 personas vieron el domingo 25 de febrero, un día después del segundo aniversario de la invasión ... rusa de Ucrania, la película 'Il testimone' ('El testigo'), un filme de propaganda del Kremlin sobre la guerra. El largometraje, que ya había suscitado debate por la negativa de los alcaldes de Bolonia y Florencia a su proyección, encontró apoyo en la organización local del Frente de la Disidencia, situado ideológicamente en la extrema derecha, y el patrocinio del ayuntamiento que preside Stefano Zuccarini, de la Liga, que lidera el vicepresidente Matteo Salvini.
Esencialmente, 'El testigo' es una recopilación de muchas de las mentiras del Kremlin utilizadas para justificar la invasión de Ucrania. Representa a los soldados ucranianos prometiendo lealtad a Hitler y cometiendo atrocidades. El filme, que fue un fracaso de taquilla en Rusia, está de gira por Italia desde noviembre, con proyecciones especiales organizadas por grupos filorrusos, a pesar de las numerosas críticas del público y de las autoridades.
La experta Nona Mikhelidze, destacada investigadora del Instituto de Asuntos Internacionales de Roma, asegura que Moscú ha impulsado numerosos grupos cívicos locales, bajo el paraguas de asociaciones culturales ruso-italianas, para promover la causa de Rusia, especialmente en el norte industrializado, el tradicional bastión de la Liga. En la organización de eventos y diversas iniciativas destaca, entre otras, la asociación de voluntarios 'Vento dell'Est' ('Viento del Este'), vinculadas al mundo del neofascismo y en buenas relaciones con líderes políticos. Su objetivo es difundir una narrativa que justifique la agresión rusa contra Ucrania.
Cartel de 'El Testimonio', la película rusa que recoge la propaganda sobre la guerra en Ucrania
Medios afines
La reciente proliferación de eventos de propaganda rusa se ve acompañada de una extensa red de información que, en general, se trata de desinformación. Por ejemplo, existe un periódico digital, 'Il Corrispondente', que fue el primero en dar en exclusiva la noticia de que el extranjero asesinado el 13 de febrero en la localidad alicantina de Villajoyosa era en realidad Maxim Kuzminov, piloto ruso que había desertado a Ucrania con su helicóptero. Su exclusiva fue presentada por ese medio como si su muerte fuera una justa sentencia contra un criminal y no el asesinato de un piloto que había denunciado públicamente la guerra de Putin en Ucrania: «Los traidores no viven mucho tiempo».
Marco Mancini, exresponsable de los servicios de Inteligencia italianos, considera que detrás de 'Il Corrispondente' están los servicios secretos rusos. El medio indica como sede una falsa dirección en la Plaza de España de Roma y tiene un código fiscal inexistente. Uno de sus colaboradores, Amedeo Avondet, un turinés de 24 años y fundador de Italia Unida -un nombre que emula Rusia Unida, el partido de Putin-, no tuvo empacho en asegurar la semana pasada, en un programa del canal La7, que sus colaboraciones con 'Il Corrispondente' se las pagan desde España, Inglaterra e Israel, y que, además, mantiene contactos con la Embajada rusa en Roma.
La ofensiva propagandística desatada por Rusia en Italia y en otros países europeos se ha incrementado ante las decisivas elecciones al Parlamento de Estrasburgo en junio próximo. Así lo denunció el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, al ser preguntado por el 'Corriere della Sera' sobre la posibilidad de que Europa realmente pueda reemplazar a Estados Unidos si Trump gana las elecciones y decide bloquear el envío de armas. «En Italia -respondió Zelenski- hay muchos a favor de Putin, y en Europa también. Estamos preparando una lista de ellos, no sólo en lo que respecta a Italia, para presentarla a la Comisión Europea. ¿Comprenderá la opinión pública europea que Rusia no es sólo una amenaza para Ucrania, sino para todos ustedes? ¿Están las sociedades europeas preparadas para este desafío? Veo que todavía no, ni vosotros italianos, alemanes y los demás».
El principal temor del presidente ucraniano es que aumente en Europa el cansancio y el deseo de llegar a un acuerdo con Moscú para poner fin a un conflicto que sigue amenazando a la propia Unión Europea. Dos años después de la invasión rusa, sólo el 10% de los europeos cree que Ucrania puede derrotar a Rusia, según una encuesta realizada en toda la UE. El sondeo, encargado por el centro de investigación del Consejo Europeo de Relaciones Exteriores (ECFR), mostró que el pesimismo sobre el resultado de la guerra está alimentado por la fallida contraofensiva de Ucrania, y por un posible cambio en la política estadounidense si Trump finalmente regresa a la Casa Blanca.
El apoyo a Ucrania sigue siendo alto en toda la Unión Europea, pero los autores del estudio dicen que los políticos deberían centrarse en lograr una paz aceptable. En Italia, las encuestas indican que el 75% de los ciudadanos es favorable a la ayuda humanitaria a Ucrania, pero sólo el 42% es partidario de enviar armas a Ucrania: es el porcentaje más bajo desde el inicio de la guerra.
El aumento de la propaganda de Moscú, y la reciente muerte del disidente ruso Alexéi Navalni en una prisión remota en Siberia, han servido para iluminar y poner en evidencia el mapa de los líderes putinianos en Europa y sus alianzas. Se pensaba que la muerte de Navalni uniría a todos en la condena a Vladimir Putin. Pero no ha sido así. En Italia, mientras la primera ministra, Giorgia Meloni, apoya con firmeza a Zelenski, el vicepresidente del Gobierno, Matteo Salvini, líder de la Liga, ha suscitado polémica al limitarse a expresar su «profundo pésame» por la muerte de Navalni, el mismo mensaje que se utilizaría para dar condolencias por un fallecido en su cama debido a la vejez. Salvini, admirador de Putin desde hace mucho tiempo, afirmó que «toca a los médicos y a los jueces aclarar las causas de su muerte, no a nosotros», mientras la mayoría de los Gobiernos occidentales y la viuda de Navalni han culpado directamente a Putin por su asesinato.
También el partido de extrema derecha alemán AfD (Alternativa para Alemania) y su líder, Tino Chrupalla, minimizaron la responsabilidad de Putin en la muerte del disidente Navalni, con palabras muy similares a las utilizadas en Italia por la Liga. AfD y Liga son aliados en el Parlamento Europeo, donde forman parte del mismo grupo, Identidad y Democracia.
El principal temor del presidente ucraniano es que aumente en Europa el cansancio y el deseo de llegar a un acuerdo con Moscú
El líder de AfD, Tino Chrupalla (centro), es considerado prorruso
Fascinación peligrosa
La Liga de Salvini firmó en 2017 un acuerdo con la formación de Putin, Rusia Unida, para mantener «activas relaciones entre ambos partidos» durante cinco años. El contrato fue renovado automáticamente en marzo de 2022, pocos días después de la invasión de Ucrania.
Además, Salvini, que ha sido fotografiado con camisetas con la cara de Putin, llegó a escribir en 2015, cuando era europarlamentario, un comentario laudatorio explícito: «Acaba de intervenir el Presidente Mattarella [jefe del Estado]. Cedo dos Mattarella por medio Putin». Por ese motivo, el senador Carlo Calenda, líder de Azione, partido centrista, ha exigido a Salvini que «aclare si los lazos de la Liga con Rusia se han cortado o no. Es una cuestión de seguridad nacional fundamental».
En la fascinación por el putinismo no están solos la Liga y AfD. Es como un río con muchos afluentes que baña el nacionalismo soberanista. En Francia está Marine Le Pen, aliada de Salvini y presidenta de Agrupación Nacional, que recibió créditos de bancos rusos próximos a Putin para financiar su partido. Le Pen también obtuvo dinero de un banco húngaro próximo al primer ministro Viktor Orbán, otro putiniano convencido.
En la larga lista de políticos que ha sostenido la expansión y la influencia del Kremlin en Europa cabe destacar a Junts per Catalunya y a su líder, Carles Puigdemont, con vínculos de Rusia en el 'procés', según la investigación del magistrado Joaquín Aguirre. Ante un presidente Putin empeñado en modificar el equilibrio internacional, parece clara la infiltración rusa incluso en importantes naciones atlánticas, como Francia, Alemania, Italia e incluso Estados Unidos, donde Donald Trump, candidato a la Casa Blanca, nunca deja de enviar señales conciliatorias inequívocas al dictador ruso.