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de lejos

¿Qué tiene en común la política de EE.UU., Francia, Israel y España?

Dentro de la banalidad que caracteriza a esta nueva era de los extremos, los populistas cuentan además con una gran ventaja: la falta de memoria

Trump podrá optar a la presidencia, incluso si está en prisión

El expresidente de EE.UU. Donald Trump reuters
Pedro Rodríguez

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Las democracias occidentales viven en el mundo de ayer. Se resisten a asumir que el gran botellón del bipartidismo, con sus dinámicas y reglas, se terminó hace mucho tiempo. Y ahora toca lo más difícil: hacer política, incluso gobernar, con los extremos. No importa que ... se requieran siete escaños para formar gobierno o que el ímpetu de la extrema derecha sirva de puntilla a un 'statu quo' inexistente. Las fuerzas más radicales y populistas, que antes se situaban en la periferia del espectro político, ahora son imposibles de ignorar.

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