El partido sirio Baaz, de origen neonazi, principal apoyo de Putin en Oriente Próximo

El proceso de reanudación de relaciones, que lleva en marcha desde hace semanas, es un reconocimiento por parte del Gobierno de Erdogan del triunfo del dictador sirio, Bashar al Assad, respaldado durante todos estos años solo por Rusia y por Irán. Al mismo tiempo constituye para el régimen de Putin un trofeo mayor. La Siria de Al Asad, que está a punto de reanudar relaciones con vecinos hasta ayer enemigos, está llamada a constituir el principal bastión de Rusia en Oriente Próximo.

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Lo que es menos conocido, incluso por sus propios seguidores, es que el partido en el que se apoya a Bashar al Assad, el partido Baaz ('renacimiento' en árabe), es de origen nazi. Fue creado en 1940 por dos árabes admiradores del régimen de Hitler, cuando el nazismo vivía su momento de mayor esplendor y ya estaba en marcha el régimen colaboracionista francés de Vichy.

Cuando en 1941 Gran Bretaña y la Francia libre ocuparon Siria y el Líbano, el partido Baaz pasó a la clandestinidad, para volver a emerger en el poder años más tarde tanto en Siria -hoy con la dinastía de los Assad- como en Irak, donde había llevado a cabo un intento efímero de proclamar un Estado nazi durante la Segunda Guerra Mundial.

El Baaz exalta la raza -en este caso la árabe-, proclama la necesidad de que el Estado tenga un partido único, y aboga por un régimen de gobierno socialista. Primero fue el nacionalsocialismo, y cuando el nazismo desapareció se abonó al socialismo marxista para así arrimarse a la Unión Soviética.

Desde el principio, su glorificación de la raza ha ido a la par con el rechazo del capitalismo occidental, primero europeo y luego norteamericano. El Baaz predica un modelo peculiar de 'socialismo árabe', teóricamente laico pero que sabe adaptarse con pragmatismo a las circunstancias de una sociedad musulmana, como demuestra la invocación de Sadam Husein en su día al Corán para justificar su 'guerra santa', o la pasión que hoy demuestra en Damasco Bashar al Assad por aparecer en público rezando en la mezquita.