Meloni presenta oficialmente su candidatura a las elecciones europeas: «Enviaremos a la izquierda a la oposición también en la UE»
«Siempre me he considerado un soldado y los soldados no dudan en ponerse en primera línea cuando es necesario», asegura la primera ministra italiana
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Giorgia Meloni durante una reunión de campaña del partido Hermanos de Italia, en Pescara, antes de las elecciones europeas
La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, convierte las elecciones europeas en un referéndum sobre su Gobierno y su persona, al anunciar, en un largo discurso, que encabezará las listas de su partido en los comicios del 8 y 9 de junio. “Los ciudadanos me ... llaman Giorgia, no presidente, no Meloni. Para mí es importante, precioso. Durante años he sido objeto de burla por mis raíces populares, nunca entendieron que estoy y estaré siempre orgullosa de ser una persona del pueblo. Si queréis decirme que todavía creéis en mí, simplemente escribid Giorgia en la papeleta electoral. Siempre y sólo seré una de vosotros, una persona a la que podéis tutear.
El poder no me cambiará”. Con estas palabras, entre grandes aplausos del público, y el Himno Nacional, la primera ministra, Giorgia Meloni, cerró su discurso de una hora ante la Conferencia programática de su partido, Hermanos de Italia, en la ciudad de Pescara, de la región de Abruzzo, en la costa adriática. El objetivo de Meloni, que renunciará al escaño al Parlamento Europeo, es confirmar la fuerza de la coalición de Gobierno, y sobre todo ser el primer partido de la derecha en Europa. Aspira a lograr el 30% de los votos, superando en cuatro puntos porcentuales el resultado (26%) de las elecciones generales de hace año y medio.
Giorgia Meloni ha reivindicado los resultados de estos 18 meses de Gobierno en inmigración y política económica, a pesar de las dos guerras en curso y la dificultad que arrastra Italia en las cuentas públicas. Atacó a los burócratas de Bruselas, a la oposición y calificó a los verdes como “talibanes”.
La líder de Hermanos de Italia destacó que ha llegado el momento de cambiar Europa, mandando a la izquierda a la oposición: “Queremos hacer en Europa lo que hicimos en Italia, una mayoría que reúna a las fuerzas de centro derecha y que finalmente ponga a la izquierda en la oposición también en Europa. Es una empresa difícil, pero posible. Nuestras ideas siempre serán incompatibles con las de la izquierda. Nuestra idea es una Europa confederal, libres en casa propia. Los días 8 y 9 son una ocasión única para el destino de nuestra nación, de una Italia fuerte y creíble, tan ambiciosa como para cambiar Europa. Estamos ante una batalla decisiva”.
Con orgullo, Giorgia Meloni explicó el éxito de su política exterior, atacando también a la izquierda: “Italia ha vuelto a ser protagonista en Occidente, en Europa, en el Mediterráneo, después de los años de servilismo de cierta izquierda, después de los años de ruptura por parte del Movimiento 5 Estrellas. Ha regresado una Italia que respeta sus compromisos internacionales, que es mirada con respeto porque tiene el coraje de tomar decisiones correctas incluso cuando esas decisiones pueden ser impopulares. Como la de apoyar al pueblo ucraniano que lucha por su libertad contra el imperialismo neosoviético de Vladimir Putin”.
Giorgia Meloni lanzó un duro ataque a algunas políticas europeas, especialmente a la "ideología verde", de los "talibanes verdes", y a la transición ecológica, "diseñada por burócratas". Para Meloni, es una "idiotez suicida" impulsar los coches eléctricos sin tener en cuenta que “se producen" en países que "no respetan ni remotamente las limitaciones medioambientales de nuestras empresas". La batalla continuará en el futuro: “Hemos luchado y pretendemos seguir haciéndolo contra locuras ideológicas como la de no producir más coches diésel y gasolina. Nadie niega que la electricidad sea parte de la solución para la descarbonización del transporte, lo que yo niego es que pueda ser la única solución, porque argumentar lo contrario es simplemente una idiotez".
Refiriéndose a los informes encargados por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen sobre competitividad, a Mario Draghi, y sobre el futuro del mercado único, a Enrico Letta, la primera ministra subrayó que a ella la llamaron oscurantista por las mismas cosas que ahora dicen ellos: "Quienes hoy aplauden a Letta y Draghi tildaron nuestras críticas de oscurantismo o negacionismo: la verdad es que siempre hemos tenido razón, no era negacionismo u oscurantismo, era sencillo realismo”.
La líder de Hermanos de Italia afirmó que “nunca había hecho profesión de antieuropeismo” y resaltó que hoy los analistas reconocen la solidez de la economía italiana: “Hasta los observadores más severos se ven obligados a tomar nota de la solidez de nuestra economía, de la seriedad con la que el Gobierno gestiona las cuentas públicas”. Como reflejo de los buenos resultados de la economía, Giorgia Meloni destacó la prima de riesgo, que “ha caído en más de 100 puntos básicos: desde 236 puntos a 131 ayer, mientras algunos decían, en sueños interesados, que se iba a disparar hasta los 600 puntos”.
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