Las frases de la extrema izquierda francesa que serán investigadas: «Los crímenes de guerra de Israel son estimulados por Macron»
El ministro de Interior pide al de Justicia que investigue e instruya un posible delito de apología del terrorismo en tales afirmaciones
La diputada Danièle Bono declaró sobre el grupo palestino que es «un movimiento de resistencia» cuyo objetivo es «la liberación de Palestina y resistir a su ocupación»
Directo | Sigue la última hora de la guerra entre Israel y Hamás
Gérald Darmanin, ministro del Interior de Francia
Gérald Darmanin, ministro del Interior, ha pedido al Ministerio de Justicia que investigue e instruya un posible delito de apología del terrorismo que pudieran haber cometido quienes apoyan a Hamás, comenzando por Jean-Luc Mélenchon y otras personalidades de La Francia Insumisa (LFI, ... extrema izquierda populista), el partido 'hermano' de Sumar y Podemos.
El día 7, tras el inicio de los bombardeos de Hamás contra Israel, La France Insoumise (LFI), el partido de Jean-Luc Mélenchon, publicó un comunicado oficial afirmando: «La ofensiva armada de las fuerzas palestinas, consumada por Hamás, interviene en un contexto de intensificación de la política de ocupación israelí en Gaza». El comunicado tuvo una redacción «colectiva», dirigida, por Mélenchon.
Esa 'equidistancia' fue interpretada por todas las fuerzas políticas de izquierda y derecha como un apoyo a Hamás, en cuya carta fundacional se defiende la destrucción de Israel para construir un Estado islámico.
Ante las críticas de todo el arco iris político, Mélenchon reaccionó a título personal: «Los crímenes de guerra contra los palestinos de Gaza, han sido estimulados por el silencio aprobador de quienes nos denuncian». Mélenchon añadiría: «Los crímenes de guerra de Israel son estimulados por Macron».
Esas primeras declaraciones de Mélenchon, calificando a Hamás, como representante de todas las «fuerzas palestinas», tras el inicio de su bombardeo de Israel, desde Gaza, comenzaron por dividir y enfrentar a LFI con la dirección del PCF, el PS y el gobierno de Emmanuel Macron, que denunciaron muy pronto la condición terrorista de Hamás.
Según un sondeo publicado días pasados, un 57 % de los franceses piensan que el partido de Mélenchon es un partido peligroso para la democracia. Según el mismo sondeo, 'solo' un 52 % estima que la extrema derecha es peligrosa para la democracia.
La gota que ha colmado el vaso de agua sucia, en curso de 'desbordar', han sido las declaraciones de Danièle Bono, nacida en Gabón, diputada de LFI, que ha declarado: «Hamás es un movimiento de resistencia. Es un grupo político que tiene un brazo armado que tiene por objetivo la liberación de Palestina y resistir a su ocupación». Franco-gabonesa, Bono ha participado desde hace muchos años en «acciones» que han rozado la violencia callejera en varias ocasiones.
Al mismo tiempo que pedía la intervención del Ministerio de Justicia, Darmanin comenzó por responder: «No. Hamás es un movimiento terrorista. Es mi deber pedir una intervención del Fiscal de la República».
Partido 'hermano' de LFI, el Nouveau Parti Anticapitaliste (NPA), liderado por Philippe Poutou, también anunció su apoyo expreso a Hamás, tras el inicio de sus bombardeos contra Israel, declarando: «Apoyamos a los palestinos y los medios que han elegido para resistir a la ocupación de Israel». Darmanin también ha pedido su inculpación por presunto delito de apología del terrorismo, justificando de este modo su decisión: «El NPA se comporta como portavoz de una organización terrorista en Francia».
Desde el inicio de los bombardeos de Hamás contra Israel, el pasado día 7, los servicios de seguridad del Estado han procedido a más de un centenar de detenciones de hombres y mujeres que habrían cometido actos antisemitas. El presunto delito de apología del terrorismo afecta a la mayoría de los dirigentes de LFI y el NPA, entre una veintena de personas próximas a la extrema izquierda francesa.