Cinco policías de Memphis, acusados de homicidio por una paliza mortal a un hombre negro

Davis les iba a mostrar los vídeos del incidente, en el que los cinco policías -todos ellos también de raza negra- dieron una paliza mortal a Nichols durante una parada de tráfico rutinaria. Ocurrió el pasado 7 de enero, y la víctima murió tres días después.

Los cinco policías -Demetrius Haley, Desmond Mills, Emmitt Martin, Justin Smith y Tadarrius Bean- fueron acusados este jueves de homicidio en segundo grado, además de otros delitos, como agresión agravada y secuestro.

El Departamento de Policía de Memphis les había expulsado el pasado día 20, después de recabar información sobre la parada de tráfico y revisar los vídeos de sus cámaras corporales. Tras la acusación, han quedado detenidos.

El incidente, que apunta a revivir el debate nacional sobre los abusos policiales frente a la minoría negra, empezó cuando los agentes dieron el alto a Nichols, que iba en su coche, a menos de cien metros de la residencia de la víctima.

El motivo de la parada fue conducción temeraria. Nichols trató de huir a pie de los agentes, que le alcanzaron, detuvieron y propinaron una paliza.

«Estoy asqueado por lo que vi», dijo este jueves David Rausch, director de la Oficina de Investigación de Tennessee, sobre el contenido de los vídeos durante una rueda de prensa en la que anunció los cargos a los policías. Su conducta fue «horrorosa», «esto no tenía que haber pasado», añadió.

Davis, la jefa de la policía, aseguró que la tragedia tendrá que servir «para seguir mejorando a la policía y a nuestras relaciones con la comunidad, para mostrar a los que nos ven que este comportamiento no definirá nuestra comunidad y nuestra gran ciudad».

Davis ha sido la respuesta de Memphis al movimiento nacional contra los abusos policiales contra la minoría negra despertados por el asesinato de George Floyd en mayo de 2020. Es la primera mujer negra en el cargo y ha liderado las propuestas de reforma policial en el cuerpo.

Ben Crump, un abogado especializado en defender a las familias de negros muertos en este tipo de incidentes -se ocupó del caso de George Floyd-, aseguró tras ver el vídeo que la paliza le recordó a un capítulo lamentable de la historia de EE.UU.: la paliza que en 1991 recibió Rodney King, un joven negro, tras una detención por tráfico, y que fue grabada por un vecino de Los Ángeles. Su publicación causó fuertes revueltas en la ciudad californiana y un debate nacional sobre la brutalidad policial.

La posibilidad de disturbios en Memphis y otras ciudades de EE.UU. por el caso de Nichols es real. No solo por la acusación de homicidio a los policías, sino porque las autoridades publicarán este viernes por la tarde los vídeos que grabaron la paliza.

«Me uno a la familia de Tyre en la petición de que las protestas sean pacíficas», reaccionó el presidente de EE.UU., Joe Biden, tras conocer la imputación y la inminente publicación de las imágenes. «La ira es comprensible, pero la violencia nunca es aceptable».