Trump elige a la actual embajadora en Canadá para la ONU

Craft es el presidente y consejero delegado de Alliacne Resource Partners, el tercer mayor productor de carbón del Este de EE.UU. El sector minero ha sido uno de los más beneficiados por la elección de Trump, que desmanteló las regulaciones medioambientales de su antecesor, Barack Obama, e impulsó las industrias energéticas.

En la presidencia de George W. Bush, Knight Craft sirvió en la delegación diplomática de EE.UU. ante la ONU como delegada suplente. Su gran padrino para el puesto de máxima responsabilidad en el organismo internacional ha sido Mitch McConnell, líder de la mayoría republicana en el Senado, y representante por Kentucky, de donde Knight Craft es originaria.

«Kelly ha hecho un trabajo sobresaliente representando a nuestra nación y no tengo duda de que, bajo su liderazgo, nuestro país será representado al máximo nivel. ¡Enhorabuena a Kelly y a toda su familia», escribió Trump en el anuncio por Twitter del nombramiento.

Knight Craft tendrá que ser sometida ahora a la confirmación en el Senado. Si consigue el beneplácito de la cámara alta, como se supone, ocupará un puesto de embajadora vacante desde diciembre por la salida de Nikki Haley, la ex gobernadora de Carolina del Sur.

Knight Craft no fue la primera elección de Trump, que en un primer momento se decantó por Heather Nauert, una ex presentadora de la cadena de noticias Fox News, la favorita del presidente, sin experiencia diplomática y que había desempeñado durante los dos últimos años el puesto de portavoz del Departamento de Estado.

La semana pasada, todavía sin haberse iniciado el proceso de confirmación, Nauert anunciaba que renunciaba al cargo por motivos familiares. Al parecer, se descubrió que había tenido una niñera en su casa en situación irregular y eso podría haber comprometido su confirmación en el Senado.

Knight Craft tendrá delante importantes desafíos en la ONU -desde la crisis en Venezuela a las relaciones con Rusia-, pero Trump ha dado señales de una creciente desconfianza en la organización internacional. De hecho, todo apunta a que la próxima embajadora ante la ONU perderá la calidad de miembro del Gabinete presidencial de EE.UU., como había ostentado Haley hasta su dimisión.