Liberado un preso de Tiananmen tras 23 años de cárcel
Li Yujun, que se ha pasado la mitad de su vida entre rejas, era uno de los 20 presos que siguen en la cárcel por las protestas de 1989
Pablo m. díez
Tras pasarse casi 23 años entre rejas, más de la mitad de su vida, a principios de mayo fue liberado Li Yujun , uno de los 20 presos que aún quedan en la cárcel por las protestas democráticas de Tiananmen en 1989 contra el ... autoritario régimen chino. Según informó en un comunicado la ONG Defensores Chinos de los Derechos Humanos (CHRD, en sus siglas en inglés), Li pudo volver a su hogar, pero será vigilado por la Policía durante los próximos ocho años. Así, tendrá que personarse en comisaría una vez al mes y no podrá salir de Pekín ni conceder entrevistas a los medios de comunicación o expresar sus opiniones en internet.
Li Yujun, que ahora tiene 45 años, fue condenado por quemar un tanque del Ejército chino en el distrito de Chaoyang la noche del 3 de junio de 1989, cuando las tropas se dirigían a la céntrica plaza pequinesa para sofocar la revuelta de los estudiantes que pedían reformas democráticas y el fin de la corrupción. En aquel entonces, era un vendedor ambulante con poco más de 20 años y, como los miles de chinos que aquellos días se echaron a la calle para honrar la muerte del líder reformista Hu Yaobang, quería un cambio de rumbo en el régimen comunista. Espoleada por los nuevos aires de libertad que hacían tambalearse al Telón de Acero en la Europa del Este y la Unión Soviética, la Primavera de Pekín reclamaba su propia «Perestroika» de ojos rasgados coincidiendo con una visita de Gorbachov a la capital china para participar en una reunión del Banco Mundial. Pero el sangriento aplastamiento de las manifestaciones estudiantiles, ordenado por el entonces primer ministro Li Peng, se cobró cientos de muertos y puso fin a las demandas de la sociedad china. Desde entonces, el régimen ha aumentado su apertura económica y social para mejorar el nivel de vida, pero ha endurecido la represión contra los disidentes políticos y aún mantiene a varios manifestantes de Tiananmen en la cárcel.
En enero de 1991, el Tribunal Superior Popular de Pekín condenó a Li Yujun por un delito de «incendio» y lo condenó a pena de muerte, con una suspensión de la ejecución de dos años. Pasado ese tiempo, su pena fue conmutada por una cadena perpetua que, en 1996, se redujo a 20 años de cárcel. Gracias a su buen comportamiento, las autoridades carcelarias rebajaron su sentencia y le permitieron salir en mayo de la Prisión Número 2 de Pekín, donde aún siguen pudriéndose algunos manifestantes de Tiananmen.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete