«Ruby se prostituía en la residencia de Berlusconi cuando era menor»

La participación de Ruby en las sesiones de «bunga bunga» en la residencia de «Il Cavaliere» en Arcore, «en un contexto de actos y cenas en los que se pagaba por actos sexuales», ha podido ser reconstruida «gracias a numerosas conversaciones telefónicas, entre ellas una de Ruby con su novio Luca Risso el 6 de octubre 2010», así lo ha explicado al tribunal el subjefe jefe de la policía judicial de Milán, Marco Ciacci.

Emergen también pagos sospechosos en las agendas secuestradas a algunas de las jóvenes que asistían en la residencia de Arcore a los festines sexuales, o «cenas elegantes» según expresión Berlusconi. Por ejemplo, analizando la agenda intervenida a Iris Berardi, se comprueba que la joven brasileña había apuntado las cifras en euros que había recibido en los seis primeros meses del 2010, según ha explicado otro subjefe de la policía judicial, Giorgio Bertoli, que ha participado también en estas pesquisas. En tres ocasiones, la Berardi cita el nombre de «Papi» (así llamaban a Berlusconi), y al lado la cifra 2.000 euros. Las fechas de recepción de esas cantidades coinciden con la presencia de la brasileña en la residencia de Berlusconi en Arcore.

Los testigos de la acusación han declarado también ante el tribunal que «durante las cenas de Arcore hay fotografías que documentan efusiones entre chicas, disfraces de Papá Noel y policías ». En particular, se han citado fotos tomadas por un teléfono móvil de una de las asistentes al «bunga bunga», Ioana Visan. La brasileña Berardi «ha sido inmortalaza vestida de Papá Noel y con escasa ropa». Bárbara Guerra, otra asistente habitual, «fue fotografiada con un uniforme de policía y con esposas en la mano». En el dossier, ha explicado el funcionario de policía Bertoli, «figuran también nueve fotografías de una habitación de dormir, con una cama deshecha, y en un mueble aparecen fotos de Silvio Berlusconi cuando era joven. Estas fotos se encontraban en el ordenador de Bárbara Guerra y fueron tomadas a las 4,51 horas del 24 de octubre 2010 en Arcore».

Silvio Berlusconi no asistió al juicio, cuya próxima audiencia será el próximo 27 de enero. Como testigos para su defensa, Silvio Berlusconi ha «contratado» dos estrellas: El actor de Hollywood George Clooney y al futbolista del Real Madrid, Cristiano Ronaldo.

El ex primer ministro temía que todos los medios internacionales se concentraran en los trapos sucios que saldrán en este juicio. Su situación se ve complicada, con la confirmación por parte de altos funcionarios policiales, de que hubo prostitución en Arcore y no simples «cenas entre amigos», como siempre ha dicho Berlusconi. En cualquier caso, el escándalo tendrá seguramente menos repercusión mediática de la que cabía esperar si «Il Cavaliere» hubiera continuado como primer ministro.