Reino Unido comienza a evacuar a los familiares del personal de su embajada en Teherán

En la sección para viajeros británicos sobre la situación de seguridad en distintos países, la cancillería añadió una actualización ayer lunes sobre Irán, desaconsejando cualquier viaje que no sea “esencial”. Sin embargo, en esa misma actualización señala que “por el momento no creemos necesario aconsejar a los británicos a que dejen Irán”. Según la portavoz de cancillería no había contradicción entre este consejo y la evacuación de familiares. “No consideramos esencial que la gente que está en Irán deje el país y de hecho nuestro personal no lo está haciendo. Pero igual estamos monitoreando la situación contínuamente”, indicó al ABC.

Desde la plegaria de Jameini, el discurso oficial de ambos países se ha endurecido. Ese mismo viernes, el primer ministro Gordon Brown dejó de lado el tono mesurado usado hasta el momento para fustigar al gobierno de Terán por la violencia y las restricciones a la prensa mientras que la cancillería le exigió explicaciones al embajador iraní en Londres sobre las acusaciones que lanzó el Ayatollah. El domingo el gobierno de Mahmoud Ahmadinejad expulsó al corresponsal de la BBC en Teherán John Lyne y ayer por la mañana el portavoz de la cancillería persa redobló las acusaciones contra el Reino Unido y Estados Unidos.