La Primera dama de Argentina plagia presuntamente 20 páginas de Wikipedia para su tesis

Alejandro Alfie, periodista de Radio Continental, una de las principales emisoras de Argentina, destapó el escándalo de la «sucesión de plagios» y lamentó que «la docente» que revisó el trabajo, Rosaura Audi, no se diera cuenta, «de que su alumna había copiado el 30 por ciento de su contenido». Para mayor gravedad, además, detalla, «unas 20 páginas no tenían nada que ver con el tema de la tesis. Estaban pegadas textual de Wikipedia». En concreto, advierte son «de la 28 a la 48» donde «habla de la historia de la deuda externa» , un asunto, por cierto, ajeno al título de la tesis titulada: «Análisis de la tensión interdiscursiva entre Néstro Kirchner y Clarín durante el periodo 2003-2007».

De momento, la Universidad de Palermo -con prestigio reconocido- evita pronunciarse sobre el escándalo. Yáñez salió al paso del mismo con un pliego de descargo en su defensa donde menciona que cita mediante links y da a conocer las fuentes. En el comunicado, aclara que no era una tesis si no un trabajo para la materia “Seminario y Trabajo de Integración II”. «Es evidente -protesta- que intentan socavar mi fortaleza. Buscan alguna clase de debilidad y como no la encuentran, la inventan».

Fabiola Yañez, tras exponer su defensa, critica a la prensa que se ha hecho eco de este presunto plagio, que podría costarle el título universitario . «No me extraña que quienes dicen haber logrado alcanzar semejante hallazgo, nada digan y hasta silencien el contenido concreto de aquella investigación», en referencia al trabajo sobre el choque de titanes que se produjo entre Clarín y el Gobierno de Néstor Kirchner, el expresidente obsesionado con arruinar al principal grupo de comunicación de Argentina (llegó hasta a mandar furgonetas con inspectores de Hacienda para intervenirlo). Pero la lectura de Fabiola Yáñez, en su trabajo, es radicalmente distinta, como reproduce el periódico 'El Día': «pude demostrar acabadamente, ítem por ítem y tema por tema, parte por parte, que el Poder Ejecutivo de la nación en el periodo 2003 a 2007, confrontó las presiones de un grupo empresario mediático que a través de las mismas pretendió condicionar el Gobierno».

A título personal, Fabiola Yáñez se declara, «una persona responsable y estudiosa. Lo hago callada y con la identidad humilde de la que provengo y como vivo. Me veo en un sitio de protagonista que no he buscado. Siento una especia de orgullo que me fortalece al notar que mi trabajo de investigación está siendo observado con lupa. Me reconforta el modo cómo los profesores evaluaron mis conclusiones alcanzadas tras varios meses de trabajo». Dicho esto, añade sobre el trabajo, «estoy agradecida a la Universidad que lo validó y consideró valioso como para compartirlo en la web, poniéndolo al alcance de quien quiera leerlo».

La periodista y actriz, en una vuelta de tuerca sorprendente, añade: «Solo quise dejar en evidencia que tras la máscara de la libertad de prensa, alguien se creyó con derecho a co-gobernar sin haber sido elegido por el voto ciudadano. Ese y no otro, es el tema-eje que traté».

Por último, en su desarrollo del pulso que mantuvieron Néstor Kirchner y el Grupo Clarín , Yañez, explica por qué empotró un tocho sobre la deuda argentina que, en rigor, no tiene nada que ver con el titulo de su tesis y es calcado a wikipedia. «… Trato de forma complementaria la cuestión de la deuda externa, algo que mucho nos pesa a argentinos y argentinas» (sic). Y continúa: «Fingen asombro cuando ven allí que abordo el tema. No deben querer, ante la penuria que nuestro pueblo atraviesa cargando una deuda impagable, que se recuerde que fue el Gobierno de Néstor Kirchner el que logró cortar tamaño vínculo de sometimiento. Ver el presente siguiendo la perspectiva histórica aumenta la real dimensión de aquella gestión de gobierno», ensalza.

En el 2005 el presidente Néstor Kirchner decidió saldar con un solo pago, la deuda de 9.000 millones de dólares que mantenía con el Fondo Monetario Internacional. La decisión se celebró en Argentina como si les hubiera tocado la lotería. Los interés que el país pagaba al fondo rondaban el 4,5 por ciento. Hugo Chávez salió entonces al rescate, «para librarle de las garras del FMI», comprando bonos pero lo hizo con interesés del... 9,12 por ciento. La operación fue redonda, para Chávez y quizás, para las arcas de Kirchner.