El Papa oficia en la pradera de Lourdes una misa multitudinaria

Decenas de miles de personas han asistido en la pradera del santuario de Lourdes, en el suroeste de Francia, a la misa que ha oficiado el Papa Benedicto XVI con motivo del 150 aniversario de las apariciones de la Virgen a la niña Bernadette.Tras ... la jornada de frío y lluvia de ayer, cuando el Sumo Pontífice llegó a Lourdes, hoy el día ha amenecido luminoso, lo que ha propiciado un mayor flujo de peregrinos a la pradera. A pesar del barrizal que se había formado, muchos fieles decidieron pasar la noche en tiendas de campaña, mientras otros mantuvieron una vigilia en diferentes iglesias de la ciudad.Entre estos últimos se encontraban grupos de Neocatecumenales españoles, que con guitarras y tambores pasaron la noche de vigilia entre cantos y rezos. Según fuentes de los organizadores, han acudido a Lourdes más de 30.000 españoles. En total se han congregado allí cerca de 100.000 peregrinos. Benedicto XVI llegó a la pradera hacia las 09.45 horas en el papamóvil, con el que la recorrió en medio de la multitud."Ciudadela de vida y esperanza"En la primera misa que el Papa ha oficiado en el santuario de Lourdes, Benedicto XVI ha definido este lugar como un punto "de servicio fraterno, especialmente por la acogida a los enfermos, los pobres y todos los que sufren". En ese escenario ha lanzado el mensaje de que "el poder del amor es más fuerte que el mal que nos amenaza".Desde el santuario que el Vaticano considera "ciudadela de vida y esperanza", el Pontífice ha pronunciado una homilía marcadamente mariana en la que ha resaltado la figura de María, recordando que cuando se apareció a la niña Bernadette Soubirous en 1858 le dijo: "Yo soy la Inmaculada Concepción".El Papa la ha invocado para que ayude a los matrimonios a descubrir "la belleza de un amor auténtico y profundo, vivido como don recíproco y fiel". Y denuevo ha tenido palabras para los miles de jóvenes que estaban presentes: "No tengáis miedo de decir sí a las llamadas del Señor cuando os pida que le sigáis. Sólo Él puede colmar los anhelos más profundos de vuestros corazones. Sois muchos los que venís a Lourdes para servir esmerada y generosamente a los enfermos, imitando así a Cristo, el servicio a los hermanos ensancha el corazón y lo hace disponible".Esta tarde Benedicto XVI se reunirá con los obispos franceses y después participará en una procesión eucarística.