El 'monstruo de Amstetten' es acusado formalmente del asesinato de uno de sus hijos poco después de nacer

Según el sistema legal austríaco, las penas de diferentes delitos cometidos no se acumulan, y la sentencia final se basará en el hecho de mayor gravedad, en este caso, el de asesinato. Además de exigir la pena por los delitos que ha cometido, la Fiscalía ha solicitado el ingreso de Fritzl, que permanece bajo custodia policial, en un centro psiquiátrico de reclusión de delincuentes anormales.

El mes pasado, un informe psiquiátrico definió al 'monstruo de Amstetten' como una persona perfectamente lúcida para enfrentarse a un juicio con jurado, aunque considera que sufre una degeneración psíquica y emocional grave. Se espera que el juicio comience a principios del año que viene.

La acusación de asesinato se basa en un informe pericial que concluyó que el niño, gemelo de otro, habría sobrevivido si hubiera recibido la atención médica pertinente. Para la Fiscalía, el acusado "pese a tener conocimiento de la situación de peligro para la vida del bebé, omitió premeditadamente disponer la necesaria ayuda de terceros". Este peritaje se ha basado en las declaraciones Elisabeth, madre del bebé e hija de Fritzl, que ha dicho que nada más nacer, se percató de que "algo no iba bien". La mujer ha asegurado que su padre, no reaccionó ante los evidentes problemas de salud del pequeño, que apenas 72 horas después del parto falleció y lo incineró en la caldera de la casa

La versión del 'carcelero de Amstetten' es que él no asistió al parto, que no visitó a su hija en el sótano inmediatamente tras el nacimiento y que no se enteró de que habían nacido gemelos hasta que el niño ya estaba muerto y su hija le entregó el cadáver.

El pliego de cargos contra Fritzl incluye el de esclavitud, al indicar que Elisabeth, estuvo sometida a sus deseos entre el 29 de agosto de 1984 y el 26 de abril de 2008, cuando fue liberada. La Fiscalía señala que Fritzl "secuestró y encerró" a su hija, a la que exigió sus "servicios sexuales" y la trató como si fuera su "propiedad".

Los cargos no sólo se refieren a los abusos contra su hija, sino también contra tres de los hijos de ésta, a los que mantuvo ocultos en el sótano de su casa, mientras que los otros tres fueron educados en el seno de la familia como si fueran sus nietos. El documento del fiscal se refiere a que las cuatro víctimas fueron "encerradas ilegalmente en un sótano estrecho y húmedo de su casa, sin ventanas y sin luz natural ni ventilación".