La mayoría de la dirección del PSOE cree contraproducente una moción de censura

El Grupo Socialista pide que Aznar informe el miércoles al Congreso de la reunión del Consejo de Seguridad de la ONU

10/03/2003 a las 23:53h.

MADRID. «Ya se verá». Es lo más que dice José Luis Rodríguez Zapatero. El líder de la oposición no suelta prenda, ni a sus colaboradores más cercanos, después de haber desatado el domingo las conjeturas sobre una posible moción de censura con su críptica afirmación ... de que «nos encargaremos de que se produzcan consecuencias» para el Gobierno si mantiene su apoyo a un ataque contra Irak. Pero todo apunta a que esta carta, que lógicamente se reserva ante un escenario impredecible, no está en el abanico de las iniciativas inmediatas, y que su afirmación responde a un intento de seguir «metiendo presión» al Ejecutivo, según diversas fuentes socialistas. El dato más elocuente de que no ha habido «una puesta en común» que abone esa posibilidad es que nadie del entorno de Zapatero supo de antemano lo que iba a decir.

La hipótesis de una moción de censura se planteó por primera vez en el «núcleo duro» de la dirección del PSOE, como un escenario teórico, en diciembre del año pasado, a raíz de la catástrofe del «Prestige». Y el propio Zapatero especuló con esta posibilidad el 16 de febrero, cuando afirmó en un mitin, en Ávila, que recurriría a «todos los resortes democráticos» para conseguir que el Gobierno cambiara de posición ante la crisis de Irak. Pero sus respuestas públicas siempre han sido evasivas, evitando hipotecarse con un sí o un no.

Como declaró ayer el primer secretario del PSC, José Montilla, que pudo hablar con Zapatero el domingo, el pensamiento imperante es que «este Gobierno se censura solo», aunque ello «no implica renunciar» a una moción de censura, «pero no quiere decir que se lleve necesariamente a cabo». Más claro fue el portavoz parlamentario, Jesús Caldera, cuya opinión ha tenido un gran peso en las últimas decisiones de Zapatero, y que señaló que las palabras de su secretario general «tienen que ver con el continuado control parlamentario que vamos a seguir ejerciendo para exigirle cada día al Gobierno responsabilidades políticas».
CiU no apoyaría a Zapatero
Siendo consustancial a una moción de censura su presentación por sorpresa, a fecha de ayer la mayoría del «núcleo duro» de la Ejecutiva no es favorable a este iniciativa, por entender que tendría más efectos «contraproducentes» que beneficiosos para sus expectativas de ganar las elecciones de 2004: además de dar crédito a quienes les acusan de oponerse a la guerra por oportunismo electoral, sus apoyos podrían verse reducidos a IU -sería cambiar la imagen de unidad de toda la oposición por la «alianza social-comunista»-, y, aunque éste no sea el discurso oficial, se cree que «la auténtica censura» se producirá en las elecciones municipales y autonómicas de mayo.

Parte de este análisis fue confirmado ayer por el «conseller en cap» de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas, quien adelantó la oposición de CiU a una moción de censura al señalar que eso demostraría que el PSOE «sólo busca desgastar al Gobierno». A su vez, el secretario general de ERC, Carod-Rovira, indicó que su partido «nunca» votaría a otro candidato «sólo por su oposición a la guerra».

Otros mecanismos parlamentarios

La dirección socialista maneja, sin embargo, media docena de iniciativas parlamentarias de distinta índole. Entre estas opciones, que se guardan en secreto, podrían estar desde la reprobación de varios ministros o de todo el Gobierno -una fórmula que no figura en el Reglamento pero que se ha convertido en práctica parlamentaria- a la petición de que se adelante la celebración del debate sobre el estado de la Nación. Además, se seguirá alentando la presión social.

Para empezar, el Grupo Socialista solicitó ayer que el miércoles se produzca una nueva comparecencia en el Pleno del Congreso de José María Aznar para «informar de la posición mantenida por España» en la reunión que hoy celebra el Consejo de Seguridad de la ONU, «así como de la que va a mantener en las próximas reuniones». También ha solicitado la comparecencia en Comisión del ministro del Interior por las detenciones de personas presuntamente relacionadas con Al Qaeda.