Maduro ultima una reestructuración de todo su Gobierno

Maduro, que se ha convertido en uno de los presidentes más rechazados y odiados en los últimos años en su país, parece estar detrás de una transformación ante la presencia del presidente encargado Juan Guaidó, que ha presionado en los últimos casi dos meses para sacar al usurpador del poder en medio de una devastadora crisis que tiene sumida a Venezuela desde hace cinco años.

El régimen bolivariano volvió a poner en marcha el pasado fin de semana una serie de ejercicios militares con los que pretende -según sus palabras- «defenderse» de un supuesto ataque liderado por Estados Unidos, el primer país que ha reconocido a Guaidó como presidente encargado tras juramentarse el 23 de enero pasado. Este extremo del inicio de un conflicto armado ha sido totalmente desmentido por Guaidó. En declaraciones a ABC afirmó que es Maduro el único que puede llevar al país a una guerra, al tiempo que negó estar a favor de una invasión militar extranjera.

El pasado mes de junio, Maduro ya realizó una serie de nombramientos en su Gobierno al crear el «poderoso» Ministerio de Industrias y Producción Nacional, con el objetivo de recuperar lo que él mismo denominó «fuerzas productivas de Venezuela», a cargo del controvertido chavista Tareck El Aissami, quien además está al frente de los asuntos económicos del país.

De este modo, Maduro busca cada vez más tomar medidas como estas para «renovarse, pero el caso es que siempre termina reciclando a los ministros y son pocas las caras nuevas que presenta en cada remodelación.

El presidente ilegítimo está, según Guaidó, escondido en el Palacio de Miraflores, porque no es capaz de desarrollar ni liderar actos públicos. Todo lo contrario de su oponente, que recorre el país y desafía al chavista. El pasado sábado, el presidente encargado inició la gira Operación Libertad, con la que pretende reclutar a ciudadanos que lo acompañen hasta la capital.