La liberación de Irpin amplía la zona segura en torno a Kiev
En el frente menguante de la capital ucraniana, los más vulnerables siguen expuestos a la artillería rusa sin posibilidad de escapar. Es el caso de Tatiana, una pintora que se ha quedado a cuidar a sus progenitores: su madre yace inconsciente en una cama y su padre tiene alzheimer. No hubo tiempo para evacuarlos
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Tatiana , impasible, sostiene la escoba con guantes de plástico. Un pañuelo le protege el cabello de la polvareda de las explosiones que sacuden los alrededores, haciendo retumbar el suelo, de las columnas de humo y del polvo que aún emerge de la propia ... limpieza de su vivienda, alcanzada por un proyectil ruso cuatro días atrás. Varios cubos metálicos llenos de esquirlas de metralla, pedazos de adoquines y vidrios rotos salpican su patio, donde aún se aprecia el boquete del impacto. La chapa que solía cegar su acomodada finca está ahora agujereada , como lo está su coche, el muro de la cocina –por donde entraron esquirlas ahora empotradas en la pared y en uno de sus cuadros– y la pared exterior, donde un vecino ha recubierto los boquetes con espuma de poliuretano.
«Si quieres entender por qué aún no me he ido de aquí, debes entrar», explica la pintora ucraniana mientras desbloquea la puerta, atrancada con una gruesa tabla de madera, y abre paso a su casa. En una cama medicalizada yace su madre , Zineida Volonimina, de 84 años , inmovilizada e inconsciente. «Ni siquiera sabe que estamos en guerra. Mi padre está en el dormitorio, tiene alzheimer y no entiende lo que está pasando. Un vecino se ofreció a sacarnos hace una semana pero su coche fue bombardeado. No nos queda más remedio que quedarnos aquí en medio de la guerra», explica la mujer con una serenidad sobrecogedora.
Situación de la guerra
en Ucrania
Área separatista de Donest y Lugansk
Áreas controladas por los rusos
Ningún avión vuela
por el espacio aéreo
ucraniano salvo
los aparatos
rusos
Ataques / contraataques
Rusos
Despliegue ruso
Ucranianos
Movimiento tropas rusas
A
Blindados
Alarma aérea
29 marzo
RUSIA
BIELORRUSIA
Sumy
Kupiansk
Chernígov
Severodonetsk
Chernóbil
Járkov
Izyum
Kiev
Yitomir
Lutsk
Dnipro
Rivne
UCRANIA
Leópolis
A
Zaporizhiye
Mariúpol
Vinistia
Mikolaiv
Berdyansk
Melitopol
Ivano-Frankvisk
Mykolaiv
Jerson
MOLDAVIA
Odesa
Crimea
RUMANÍA
Anexionada en 2014
Zmeiniy
200 km
Mar Negro
Fuente: Elaboración propia / ABC
Situación de la guerra
en Ucrania
Área separatista
de Donest y Lugansk
Áreas controladas por los rusos
Despliegue ruso
A
Alarma aérea
Blindados
Ataques / contraataques
Rusos
Ucranianos
Movimiento tropas rusas
Ningún avión vuela por
el espacio aéreo ucraniano
salvo los aparatos rusos
29 marzo
RUSIA
BIELORRUSIA
Kiev
UCRANIA
A
MOLDAVIA
Crimea
RUMANÍA
200 km
Mar Negro
Zona ampliada
BIELORRUSIA
RUSIA
Severodonetsk
Járkov
Chernóbil
Kiev
Yitomir
Dnipro
Mariúpol
Zaporizhiye
UCRANIA
Mykolaiv
Jerson
MOLDAVIA
Odesa
Crimea
RUMANÍA
Mar Negro
200 km
Fuente: Elaboración propia / ABC
Como la de Tatiana y sus padres, la vida en Stoyanka se congeló hace cuatro semanas , cuando Vladimir Putin lanzó la primera invasión en suelo europeo del siglo XXI con la ambición de deponer el Gobierno legítimo de Kiev y reescribir la historia a su antojo .
La pintora lleva más de un mes soportando bombardeos diarios en su localidad, la zona nueva de Stoyanka , 38 kilómetros al noroeste de Kiev. En la zona vieja, apenas medio kilómetro más allá, los carros de combate ruso disparan a todo lo que se mueve y también a las mansiones que se alzan frente a la carretera que comunica con Irpin , a cinco kilómetros y escenario de enfrentamientos hasta ayer, cuando fue liberada por tropas ucranianas. «Aquí hubo c ombates hasta hace dos días . Podía ver los tanques rusos desde mi ventana. Los soldados ucranianos nos pidieron que nos marchásemos, porque es muy peligroso, pero no tengo opción», dice la mujer encogiéndose de hombros. Ha habilitado una bomba de agua que le proporciona suministro, «aunque no tengo gas y la electricidad va y viene», pero las reservas de leña y su chimenea le permiten calentar la casa.
Durísimos combates
El exterior es la viva imagen del cerco que viven las ciudades del noroeste de Kiev, donde las fuerzas rusas están siendo repelidas tras cuatro semanas de durísimos combates. Impactos, coches destrozados, árboles y tendido eléctrico en el suelo y edificios destruidos se extienden allá donde llega la vista. En una de las intersecciones de la autopista principal, un camión ruso calcinado bloquea el paso. « Lo volamos unos días atrás» , explica Taras Suchenko, un voluntario alistado con el Ejército. «Los restos impidieron que avanzara el resto de la columna rusa, que se replegó. Ahora, parece que esta zona está asegurada al 90 por ciento , o eso espero. Nuestros tanques vuelven, y es la mejor señal, porque eso significa que los rusos se retiran».
Taras explica que los francotiradores rusos seguían apostados en la población de Babushkim Sad. «También hay en Kapitanivka», añade Viktor, uno de los soldados ucranianos que mantiene la posición de Stoyanka fuera de las manos rusas. «Y por la carretera que lleva a la vieja Stoyanka, a 500 metros de aquí». Sin embargo, «la principal batalla se libra en Myla , a cuatro kilómetros», aclara el uniformado. Los oficiales de la posición explican que han volado el puente más cercano para impedir el avance ruso , y que se han visto obligados a volar algunos edificios comerciales que podían haber servido de puesto táctico para prevenir que ganaran posiciones. Los golpes de guerrilla urbana siguen aturdiendo a un Ejército del Kremlin que poco tiene de la grandeza de la que presumía Putin.
«Hace cinco días, mis hombres y yo fuimos a una posición militar rusa. La cercamos, y cuál fue nuestra sorpresa cuando vimos a un soldado salir para aliviarse. Le capturamos con los pantalones bajados », explica Viktor desatando las risas de sus compañeros. «Al principio no quería hablar, estaba lívido, pero después entendió que no somos quienes dice su Gobierno, que somos gente normal . Y entonces comenzó a hablar. Estaba muy sorprendido porque aquí hay asfalto y electricidad incluso en los pueblos, dado que dice que en Rusia siguen viviendo en el barro», continúa el oficial. «Parecía un vagabundo, llevaba el uniforme destrozado y no tenía armas ni dotación militar . Nos dijo que se había enrolado en el Ejército tres meses atrás pero que ni siquiera tenía un contrato».
Estrategia básica
Viktor lleva asignado al arco noroeste de defensa de Kiev desde el 24 de febrero. «Hace dos semanas comenzamos a liberar territorio , y ahora tenemos claro que no llegarán a Kiev jamás». La estrategia ucraniana es tan básica como efectiva .
La media hora de trayecto desde Kiev se transforma en casi dos gracias a la interminable sucesión de puestos de control que jalonan las carreteras, dotados de todo tipo de ingenios para frenar una avanzadilla rusa, desde obstáculos hasta armamento en improvisadas casamatas de sacos terreros capaces de frenar una columna. Tras las barricadas elaboradas con bloques de cemento se ven cócteles molotov listos para ser prendidos y decenas de soldados y voluntarios a la espera. Enormes telas de camuflaje ocultan las piezas de artillería y los vehículos pesados distribuidos por el frondoso bosque que envuelve la zona en un ambiente mortecino.
La batalla de Kiev
Rusia
Ucrania
Límite municipal de Kiev
Frente
Combate con tropas
Movimiento
Bombardeos / otras acciones
Alerta bombardeos
Incendios
Centro
administrativo
ampliado
Día 29 de marzo
Plaza de la
Independencia
ZONA BAJO
CONTROL
RUSO
Palacio
Mariyinsky
Edificio
presidencial
Aeropuerto
Hostomel
Parlamento
Estatua de Lenin
KIEV
Torre TV
Bucha
Centro
administrativo
Irpin
Aeropuerto
Internacional
Sikorsky
Kiev
UCRANIA
Río Dniéper
Aeropuerto
Antonov
2 km
Fuente: Elaboración propia / ABC
La batalla de Kiev
Límite municipal de Kiev
Combate con tropas
Bombardeos / otras acciones
Incendios
Movimiento
Frente
Alerta bombardeos
Rusia
Ucrania
Día 29 de marzo
2 km
Kiev
UCRANIA
ZONA BAJO
CONTROL
RUSO
Aeropuerto
Hostomel
KIEV
Torre TV
Bucha
Irpin
Aeropuerto
Internacional
Sikorsky
Aeropuerto
Antonov
Fuente: Elaboración propia / ABC
El Kremlin parece dar por perdida la capital. El propio Vladimir Putin anunció hace escasos días que tras el final de la «primera etapa» de su invasión, las tropas rusas se concentran ahora en la «completa liberación del Donbás », lo que parece eliminar a Kiev de la ecuación militar. Los reveses efectuados por la resistencia ucraniana –la revista norteamericana ‘Forbes’ estimaba que el Ejército ruso ha perdido 530 carros de combate en este mes, de los cuales 117 han sido capturados por el Ejército ucraniano, que ha aumentado su dotación de tanques gracias a las ofensivas– han permitido, según el portavoz del Ministerio de Defensa Oleksandr Motuzyanyk, alejar a los ocupantes rusos entre 35 y 70 kilómetros de la capital .
Kiev parece cada día más segura. El presidente, Volodímir Zelenski, permanece en la ciudad, muchos capitalinos regresan tras semanas en provincias más tranquilas y algunos negocios comienzan a reabrir tímidamente para reactivar la economía y contribuir a normalizar la guerra . Otros, como Tatiana, han decidido arriesgarse a entrar y salir de la ciudad hacia el frente de guerra para cuidar de las mascotas, una de las grandes pasiones de los ucranianos. La mujer, de 68 años, recorría la autopista que comunica Kiev con el noroeste a pie, confiada en que algún conductor la acercara a su localidad, Shpytky, a unos 40 kilómetros de la capital. «Desde hace diez años trabajo como voluntaria en un albergue de animales . Tengo 25 perros allí y, si no les llevo comida, morirán de hambre», explica la anciana, cargada con una mochila llena de carne a punto de caducar. «Antes se encargaba otra persona, pero hace unos días su coche fue atacado por los rusos y ahora soy la única opción que tienen los perros para sobrevivir».
El cuidado de los animales es uno de los motivos que lleva a muchos ucranianos a permanecer en sus casas , pese a las bombas. La devoción que demuestran por su estilo de vida es otro ejemplo más de las diferencias que les separan de los rusos. Como explicaba Tatiana mientras limpiaba los escombros producidos por el bombardeo de su casa, «esta es una guerra contra la democracia , contra la independencia, contra la cultura y el mundo civilizado. Sólo queremos vivir como los demás países civilizados, no subyugados como en Rusia. Europa debe entender que Putin quiere aniquilar nuestra civili zación».
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